Un edificio de 10 plantas ha sido construido en 28 horas y 45 minutos de trabajo sin descanso en la ciudad de Changsha, en China, según ha afirmado la constructora.
Esta hazaña se pudo llevar a cabo gracias al desarrollo de módulos prefabricados previamente, que después fueron colocados uno sobre el otro.
La construcción se ha realizado de día y de noche, en menos de 29 horas sin descanso, y ya está disponible para entrar a vivir en él, según informa CNN.
La empresa ha asegurado que la rápida construcción de sus viviendas no implican ningún riesgo de derrumbe.
Este tipo de vivienda se han puesto muy de moda, porque permiten el desarrollo de nuevas casas de manera rápida y más barata.
El mercado de las viviendas modulares tiene un valor estimado de 76 mil millones de euros, según la constructora Fortune Business Insights.