La princesa Leonor abrirá este lunes una nueva etapa en su vida al iniciar sus clases de bachillerato en el internado UWC Atlantic College, situado al sur de Gales (Reino Unido), donde va a estudiar los dos cursos previos a la universidad que van a costear los reyes.
Su marcha al colegio británico tiene lugar una vez que ha completado el ciclo de primaria y de secundaria en el colegio privado Santa María de los Rosales de Madrid, el mismo en el que se formó su padre.
La heredera al trono, que el próximo 31 de octubre cumplirá 16 años, va a compatibilizar sus estudios en Gales con su actividad institucional en España.
El Atlantic College, donde se estudia el bachillerato internacional, pertenece a la red de internados de la organización Colegios del Mundo Unido (UWC, en sus siglas en inglés), cuya meta es "promover el entendimiento internacional a través de la educación".
Una de las particularidades del centro es que hay estudiantes de muchos países y de diferentes nacionalidades y creencias.
El 70% de los alrededor de 360 alumnos tiene una beca parcial o total, por lo que no proceden de familias adineradas.
En el caso de la princesa, los reyes ya anunciaron que se harían cargo de las 67.000 libras (unos 76.500 euros) que cuestan los dos años de bachillerato.
Leonor de Borbón vivirá en una de las casas diseminadas por el campus y compartirá habitación con otras tres alumnas de diferente nacionalidad.
En su habitación, tendrá una cama, un armario, una cajonera y "poco más", como dijo el pasado mes de febrero Peter Howe, el director del colegio hasta hace pocas semanas, para describir lo "espartana" de la estancia en la que se alojan los escolares.
"No será tratada de manera diferente. De eso nos enorgullecemos. Cada estudiante es igual, sin importar su origen o procedencia", dejó claro Howe.
De cada grupo se responsabiliza un profesor, que vive en otra zona de la casa con su familia y que ejerce de tutor y "padre adoptivo" de los escolares que tiene a su cargo, además de puente con sus progenitores.
En sus ratos libres, como cualquier alumno, la princesa tendrá que lavar su ropa en las lavadoras que hay en cada residencia.
También almorzará con su bandeja en el comedor del centro en mesas compartidas junto a los otros jóvenes.
No es la primera vez que la primogénita de los reyes convive con chicos de otros países, puesto que estuvo en un campamento de verano en Estados Unidos en 2018 y 2019 junto a su hermana, la infanta Sofía.
Habla perfectamente inglés, además de tener un gran dominio del francés y conocimientos de árabe y chino, lo que facilitará también su integración, al margen de que habrá algunos otros estudiantes españoles a los que ya conoció en julio en una audiencia en el Palacio de la Zarzuela.
Las clases en el colegio galés se concentran entre las 08.00 y las 13.15 horas y las tardes se reservan a servicios a la comunidad, práctica deportiva y actividad recreativa.
La princesa va a tener asignaturas de ciencias y letras, que podrá elegir entre un abanico, por lo que en cada disciplina estará en un aula con compañeros diferentes.
Otro bloque de materias está centrado en valores como la paz, el futuro sostenible y la iniciativa individual, a lo que se añaden actividades relacionadas con la creatividad (teatro, jardinería, cerámica, calceta...), el medioambiente y la práctica de deportes, como natación, baloncesto, tenis o aeróbic.
El programa académico no incluye religión, al considerarse un centro laico y sin ningún condicionamiento "político o de cualquier otro signo".
Los fines de semana los alumnos tienen la opción de hacer excursiones o diversas actividades de ocio en las instalaciones del campus.
El calendario escolar tiene varios parones vacacionales a lo largo del curso, lo que permitirá a la princesa proseguir con su actividad oficial en España, incrementada progresivamente en los últimos tres años.
La casa real comunicó en febrero que la princesa de Asturias estudiaría en Gales una vez que superó el proceso de selección, al que se presentó en septiembre del pasado año.
La princesa se incorpora al internado tras haber recibido este verano la vacuna contra la Covid-19 y de haber estado con los reyes y su hermana en Palma hasta el pasado 10 de agosto.
La heredera al trono sigue los pasos de Felipe VI al irse al extranjero a proseguir sus estudios.
El entonces príncipe de Asturias hizo en 1984 el curso de COU en el Lakefield College School de Toronto (Canadá) y posteriormente regresó a España para comenzar su etapa universitaria.