Rafael Amargo ha acudido esta mañana a firmar a la Audiencia Provincial de Madrid en cumplimiento de las medidas cautelares impuestas el pasado viernes para dejarle en libertad provisional hasta que el tribunal dicte sentencia por el juicio celebrado en el que se le acusó de un delito contra la salud pública. Acompañado por su mujer y su abogado, el letrado Marcos García Montes, el bailaor ha manifestado a los medios que confía en que será absuelto del delito reconociendo que tiene miedo a volver a la cárcel. «La cárcel tiene sus cosas buenas y malas. Ahora soy un hombre diferente. He trabajado mucho la paciencia», ha señalado.
Se le ha visto alegre y contento tras pasar su primer fin de semana en libertad tras seis meses y disfrutar junto a sus hijos y su familia, teniendo nuevos proyectos en mente que saldrán adelante si la Justicia le declara inocente. García Montes ha comentado que puede ser que la semana que viene haya sentencia por el caso en el que se sentó la semana pasada en el banquillo por la presunta venta de estupefacientes en su anterior piso de Malasaña.
En su declaración, el artista manifestó en el juicio que no tiene necesidad, «gracias a dios por su matrimonio, sus padres y sus amigos», de dedicarse «a otra cosa que no sean las artes escénicas», recordando que ha sido «bandera y baluarte en España» del flamenco y comparándose con Lola Flores por su «generosidad».
Rafael Amargo se enfrenta a nueve años de cárcel por un delito contra la salud pública en cantidad de notoria importancia, al igual que su productor Eduardo de Santos al mantener la fiscal sus peticiones de condena.