La dolencia que la reina Letizia sufre en su pie izquierdo, conocida como neuroma de Morton, le ha obligado a protagonizar una imagen insólita al participar sentada en el besamanos previo a la cena de gala ofrecida este miércoles por los reyes de los Países Bajos en el Palacio Real de Ámsterdam. Puesto que los saludos a los invitados al banquete iba a durar unos 45 minutos, doña Letizia, con vestido de noche y tiara, optó por adoptar una postura más descansada y se sentó en una silla, mientras que Felipe VI y los reyes neerlandeses, Guillermo Alejandro y Máxima, lo hicieron de pie.
Es la primera ocasión en la que la reina tiene que sentarse en un acto de estas características a causa del neuroma, consistente en un pinzamiento del nervio del hueso metatarsiano que le provoca dolor e inflamación cuando está de pie sin moverse durante un tiempo prolongado. La afección está vinculada con la metatarsalgia crónica que doña Letizia padece desde hace varios años, una lesión bastante común que genera molestia en la zona de apoyo de la planta del pie.
De su problema físico se tuvo conocimiento a través de los medios de comunicación en septiembre de 2022, poco antes de cumplir 50 años, y tiene entre sus causas el uso de zapatos con mucho tacón. Desde entonces, la reina ha empleado calzado con menos elevación para tratar de aliviar la dolencia. Los reyes llegaron ayer, martes, a Ámsterdam, con motivo de su visita de Estado. Abrieron su agenda con la recepción a la colonia española afincada en los Países Bajos y hoy tuvieron el recibimiento oficial por parte de Guillermo Alejandro y Máxima en la plaza Dam, ante el Palacio Real, y en ambos actos, doña Letizia vistió unos zapatos con poco tacón.
Además de los dos matrimonios reales, en el saludo de la cena participaron la princesa Amalia, heredera al trono, en su estreno en una visita de alto nivel de un mandatario extranjero. También estuvo la reina Beatriz, de 86 años, quien abdicó en su hijo en 2013 después de haber ocupado 33 años el trono.