La infanta Sofía ha desafiado al invierno de Madrid en su primer acto oficial sola con un traje blanco, símbolo de su bautismo que la sitúa en la senda de tener agenda, hasta ahora reservada a sus padres y a su hermana Leonor.
Sofía, que llegó este martes de Gales, donde estudia el bachiller internacional, ha debutado con discreción y atención en un escenario muy vinculado a la familia a la que pertenece. La Galería de las Colecciones Reales, que inauguraron los reyes en 2023 y alberga auténticos tesoros artísticos cedidos por varias dinastías, también la de los Borbón.
En el fondo de la muralla, que está en la parte baja del imponente museo, fría y hermosa a la vez, la infanta se ha atrevido con su primer papel oficial en solitario. Muy unida a su hermana, como se ha visto siempre que comparten actos, esta vez ha tenido que lidiar sola con lo que supone será a partir de ahora uno de sus cometidos. Servir a su familia en actos culturales, sociales o de divulgación.
La acompañaba una verdadera corte de personas, de Patrimonio Nacional y de Zarzuela, así como un grupo numeroso de periodistas y orgullosos y engalanados familiares de las personas que han ganado esta primera edición de los galardones que llevan su nombre.
Sofía, 17 años, ha entregado los premios de este concurso, joven como ella, como ha recalcado Ana de la Cueva, directora de Patrimonio Nacional. Un certamen creado con la finalidad de impulsar la difusión del patrimonio histórico, cultural y natural que gestiona la institución.
La hija pequeña de Felipe VI y Letizia se ha sentado en un sofá azul de terciopelo, ha escuchado las intervenciones que han tenido lugar y ha entregado las distinciones.
No ha pronunciado ningún discurso ni dicho ninguna palabra, aunque se ha mostrado muy próxima a los asistentes y ha intercambiado con ellos saludos de enhorabuena. También ella cubre su parte de mérito, al ponerse frente a las cámaras completamente sola, por primera vez en su vida.
A esta primera edición se han presentado decenas de candidatos, cuyos trabajos han sido meticulosamente revisados por un jurado con personalidades del mundo de la fotografía, como la fotógrafa Sofía Moro, con treinta años de dedicación, y una de las mejores retratistas de España que ha dirigido unas palabras de estímulo, una verdadera carta de amor, a los que viven detrás de una cámara.
"No hay mejor manera de enfrentar el mundo que a través de la fotografía, ha dicho Moro. Miramos el mundo de una manera única y diferente". Y ha recordado que lo que ha popularizado este género es el uso de la cámara. "Cuidemos la fotografía porque es parte de nuestro patrimonio".
Los ganadores de este certamen han recibido una tarjeta nominativa doble con acceso gratuito a todos los reales sitios y monumentos de patrimonio nacional durante un año. El segundo premio es una entrada doble para un concierto en el palacio real de Madrid con el cuarteto palatino de Antonio Stradivari. Y el tercero, un lote de libros relacionados con la foto y con Patrimonio Nacional.
A falta de palabras de la infanta, la cantante de Marina Lledó y la violinista Delaney Stockli han servido dos temas musicales subidas en la muralla, un fado y una canción que incluía esta letra: "Amarte en la distancia, te puedo ver cuando tus fotos me siento a ver. Y en las estrellas tus ojos ven cuando tus fotos me siento a ver".
Sofía ha visitado la muestra con las imágenes ganadoras, que se podrá ver para el resto del público hasta el 10 de marzo. Si como dicen las crónicas Sofía es, al igual que su padre el rey, una apasionada de la fotografía, hoy se habrá sentido como en casa, rodeada de objetivos, de arte y de preciosa inspiración para la posteridad.
Los ganadores del concurso han sido: Emilie Payn ha ganado el primer premio en la categoría de Espacios naturales, y el segundo premio ha sido para Santiago Mata Escribano con Mañana de niebla en los jardines del palacio real de Aranjuez. El tercero lo ha recibido Mariano Augusto Leiva por Tormenta sobre el paraíso.
Antonio Farto Casado con A través de la ventana, dentro de la categoría Palacios y monasterios; y la categoría Obras de Arte ha reconocido a Teresa Dorado Jiménez por Reflejos de fe.