Meta ha compartido los cambios que introducirá en Facebook e Instagram para que los usuarios europeos puedan establecer un orden cronológico para las historias y los reels, con el objetivo de cumplir con la Ley de Servicios Digitales (DSA) de la Unión Europea.
La Ley de Servicios Digitales es un conjunto de normas que busca establecer un espacio digital más seguro para los usuarios europeos de servicios en línea como redes sociales, tiendas de aplicaciones y plataformas de 'streaming' de contenido, mediante la protección de sus derechos fundamentales.
El presidente de Asuntos Globales de Meta, Nick Clegg, reconoce que es «una de las regulaciones de Internet más completas», y afirma que han estado trabajando desde su entrada en vigor en noviembre del año pasado para adaptar sus sistemas de procesos a las nuevos requisitos.
Algunos de esos trabajos incluyen las restricciones impuestas a los anunciantes en la recopilación de información de cuentas de usuarios menores de edad (entre 13 y 17 años), que desde febrero ya no ven publicidad basada en su actividad.
También las tarjetas de información que explican el funcionamiento de los sistemas de inteligencia artificial en la clasificación de contenido en Instagram y Facebook que luego se muestra en el 'feed', reels y las historias.
Ahora, la compañía tecnológica ha anunciado que los usuarios europeos tendrán la opción de elegir un 'feed' que mostrará en orden cronológico inverso (desde el más reciente) las historias y los reels de las personas que siguen, y que estará disponible en ambas redes sociales, como explica Clegg en un comunicado.
Los cambios para adaptarse a la DSA también afectan a los resultados de la búsqueda, ya que existirá la opción de que se basen «únicamente» en las palabras que escriban los usuarios, «en lugar de personalizarlos específicamente según su actividad anterior e intereses personales».
Asimismo, las herramientas que permiten denunciar los contenidos ilegales, es decir, aquellos que infringen las normas de la comunidad, se han replanteado para que los usuarios puedan acceder a ellas de manera más fácil, y en el caso de que se retire un contenido, las redes sociales seguirán información del motivo y dando la opción de apelar la decisión, pero con una gama más amplia de decisiones de moderación, por ejemplo, por violar una ley local.
Por otra parte, también han implementado dos herramientas para los investigadores: la biblioteca de metacontenido y la API, que les dará a acceso a contenido compartido de forma pública en cuentas de creadores y negocios en Instagram y en páginas, publicaciones, grupos y eventos de Facebook.