Miriam Zabalegui nació en San Sebastián hace 35 años. Es consultora en financiación para la investigación y lidera el proyecto Atalis Fundraising, una spin out de la empresa Link Knowledge Exchange cuyos clientes son la Universidad de Barcelona y la Universitat Oberta de Catalunya. Vive en Menorca desde hace seis años y está vinculada a Joves Empresaris desde 2013. En la asamblea de junio de este año ha sido nombrada vicepresidenta de Joves Empresaris de Balears y representante de la junta de Menorca junto a Tuto Saura y Marga Camps. A partir de este mes de junio, Mallorca y Menorca funcionarán de manera autónoma.
¿A qué se debe este cambio?
Detectamos que para mejorar el funcionamiento de la asociación, la estructura que había existido hasta la fecha de una junta balear impedía que hubiera agilidad a la hora de tomar decisiones. También nos impedía defender correctamente los intereses de los asociados. Necesitábamos ganar en transparencia, rapidez y proximidad pero todo ello desde la ejemplaridad.
¿Estamos hablando de independencia?
Estamos hablando de una reestructuración. Seguimos siendo Joves Empresaris de Balears pero cada isla tendrá a partir de ahora una independencia financiera y presupuestaria, y una junta soberana con un plan de acción propio. Y los temas que afecten a toda la asociación se resolverán en la junta ejecutiva de Balears, que estará formada de forma proporcional al número de socios de cada isla.
¿Son tan distintas las realidades de cada isla?
Mucho como para aplicar políticas comunes. Por tamaño, Mallorca tiene más asociados pero está en un entorno muy competitivo con entidades similares que ofrecen ayuda al emprendimiento. Menorca, por su parte, ha demostrado un fuerte liderazgo gracias a proyectos que han trascendido del ámbito local, como la feria Innovem o el coworking de El Plató de Joves Empresaris. Cada isla necesitaba estrategias distintas.
¿Cuáles son los objetivos comunes que se han marcado a nivel balear?
Generar valor para el asociado, rejuvenecer la masa social y consolidar la asociación en Eivissa.
¿No hay altas nuevas?
Hemos detectado que el grueso de asociados está cerca de los 40 años y para rejuvenecer la asociación queremos impulsar proyectos en los institutos y centros de formación profesional para despertar el talento emprendedor. En el caso de Menorca, queremos fomentar que sea vista como un lugar de oportunidad para generar empresa y recuperar el talento que se ha marchado de la isla. La parte positiva de tener una base de asociados con años de experiencia es que podremos capitalizarlo como un mentoring de empresario a empresario.
¿Cómo les afecta en Menorca ahora que se han quedado sin gerencia?
Estamos muy contentos por Carmen Crespo, pero su salida nos ha hecho reflexionar y nos ha ayudado a tomar la decisión de la restructuración que explicaba. Hemos creado la figura de un coordinador balear para la gestión financiera de la asociación en su conjunto y de cada una de las islas, pero también creamos la figura de un coordinador insular en cada una de ellas, que tendrá un perfil más comercial y de atención al asociado. Estamos en pleno proceso de selección.
¿Cómo son las relaciones con el Centre Bit de Alaior?
De colaboración total. Ya existía una buena relación con el Parc Bit de Mallorca antes de crear esta extensión en Alaior y ahora les derivaremos todas las nuevas empresas de base tecnológica que nos lleguen a nosotros y ellos harán lo mismo cuando no lo sean.
¿Han empezado a trabajar en la próxima edición de Innovem?
¡Sí! La edición de 2017 la vamos a dedicar a reflexionar sobre las personas desde el punto de vista de la formación, de la cultura empresarial, de los recursos humanos y de las nuevas maneras de organizar la empresa. Espero que a finales de este trimestre ya podamos anticipar más detalles.
¿Qué otros retos se han fijado para Menorca?
Esta nueva estructura nos permitirá tener comisiones de trabajo focalizadas en temas como la comunicación o servicios de atención al emprendedor. Queremos consolidarnos como embajadores para todos aquellos nuevos profesionales y emprendedores que aterrizan en la isla, crear una central de servicios compartidos para los asociados o aprovechar las ventajas de un acuerdo que hemos firmado recientemente con el programa Google Non-Profit. Hay muchas ideas que esperamos poner en marcha.