Este mes de noviembre las bolsas mundiales han presentado un resultado mixto que habrá dejado unos resultados neutros a los inversores que hayan sabido diversificar y no se hayan centrado en la inversión clásica de los españoles. Europa se ha llevado la peor parte y entre las más relevantes la más perjudicada ha sido la española: el IBEX ha caído un 2,97%. Buena parte de este retroceso es debido a otro desplome de Siemens Gamesa (-15,50%), seguida por dos compañías que lo vienen haciendo muy bien en los últimos años: la farmacéutica Grifols (-8,80%) y la textil Inditex (-7,34%).
En el lado opuesto, la concesionaria de aeropuertos AENA y la audiovisual Mediaset han liderado las subidas, con un 6,13 y un 4,85% respectivamente.
Las tres acciones típicas han vuelto a caer con fuerza: BBVA a pesar de las desinversiones de estos días se ha dejado un 4,41%; Santander ha sufrido menos pero también es significativa la pérdida del 3,09%, mientras que Telefónica ha bajado un 4,45%.
También ha sido muy mal mes para la única balear del mercado continuo español, la hotelera Meliá, que ha perdido un 4,72%, a pesar del impulso que ha supuesto para el sector la oferta de Barceló a NH Hoteles. El resto de bolsas del Viejo Continente tampoco han salido bien paradas; el EuroStoxx ha sido la siguiente (-2,83%), algo nada extraño ya que el 10% de sus componentes son empresas españolas (entre ellas las tres comentadas), mientras que otras como el DAX alemán (-1,55%), el MIB italiano (-1,87%) o el CAC francés (-2,37%) también han sufrido recortes.
Sin embargo, las bolsas norteamericanas y japonesa han subido con fuerza: el tecnológico Nasdaq un 2,17%, el global S&P un 2,81% y el índice nipón acumula tres meses consecutivos por encima del 3% de subidas (+3,24%). Por último, los emergentes han ofrecido un signo mixto con subidas en Hong Kong (+3,30%) y caídas en China (-2,24%) o Brasil (-3,15%).