Con el verano prácticamente finalizado y en que todos retomamos nuestras rutinas habituales, las cuales conllevan muchos desplazamientos, me parece de interés tratar y dar una pincelada sobre la asistencia sanitaria en caso del infortunio de sufrir un accidente de tráfico.
El censo de vehículos en circulación que facilita el Ministerio de Transporte y Movilidad Sostenible en Illes Balears supera el millón, a éstos tendríamos que añadir, a groso modo, los vehículos particulares de los que se desplazan por vacaciones y los destinados a alquiler que se importan para la campaña turística. Muchos vehículos que originan gran cantidad de movimientos y que indefectiblemente, son susceptibles de protagonizar un accidente que precise de asistencia sanitaria. Hay que manifestar que afortunadamente los sistemas de seguridad pasiva que se han ido incorporando en la fabricación de autos en los últimos años, añadido a la mejora de las vías de circulación, han propiciado una disminución de la gravedad de estos incidentes. Los últimos datos de que disponemos sobre atenciones sanitarias en nuestra comunidad corresponden al ejercicio 2023 y arrojan la cifra de unas 8.500 intervenciones de los servicios de emergencias relacionadas con estos hechos.
La atención sanitaria a las víctimas de accidentes de tráfico en nuestro país es prestada tanto por centros públicos como privados. A fin de establecer el proceso de atención, la patronal del seguro UNESPA suscribe convenios con distintas instituciones, sean servicios públicos de salud o patronales del sector privado. A estos convenios se adhieren voluntariamente los centros pertenecientes a dichas entidades y pasan un proceso de acreditación. Este sistema tiene la ventaja de otorgar capacidad de elección a la persona que ha sufrido un evento adverso, aportándole una mayor accesibilidad al requerir de servicios médicos. En una de sus memorias, UNESPA señala que a diferencia de otras comunidades en que impera mayoritariamente la asistencia prestada mediante medios públicos, caso de Navarra - el 87% de los pagos realizados por las compañías son a centros públicos -, en Illes Balears, la prestación de servicios es mayoritariamente realizada por su red de centros privados: clínicas, hospitales y centros homologados de rehabilitación - más del 90% de los pagos de compañías se realiza a entidades privadas -. Dichos centros se distribuyen por toda la geografía balear.
El volumen que destinaron las compañías aseguradoras a cubrir los costes derivados de la asistencia sanitaria en todo el territorio nacional durante el pasado ejercicio, fue de más de 465 millones de euros de los que a Illes Balears aproximadamente le corresponden unos 10 millones de euros. En cuanto a la condición de los accidentados atendidos, son los conductores los que encabezan el ránking de atención con un 56% seguidos de los ocupantes con un 29% y finalmente los peatones con un 11%.