Jaume Horrach, CEO de Eix Hotels, explica que, tras un inicio titubeante, la temporada ha sido buena. «Aunque el inicio de la temporada fue un tanto dubitativo, el resto de meses han sido positivos, con unas ocupaciones que no son tan altas como las del año pasado, pero con unos precios que han hecho compensar este pequeño desajuste. Hay margen de ir al alza en precios si hay una política anual de inversión e incremento de servicios dentro del establecimiento», argumenta.
Respecto al Pacto, Horrach no espera grandes soluciones. «Es un instrumento necesario en el momento de su fundación pero cuya articulación, modelo de deliberación, aporte de ideas y definición práctica aún está en disquisición y no ha tenido (ni tampoco nadie lo espera) ninguna consecuencia o repercusión fáctica», indica. Horrach no descarta la reducción de plazas turísticas, aunque reclama que, en todo caso, sea dilatada en el tiempo. «El tiempo y el mercado actuarán, más pronto que tarde, como entes facilitadores de la reducción, en uno y otro tipo de plazas, especialmente en las que sean obsoletas, desfasadas o fuera de lugar. Lo ideal es que la reducción fuera paulatina y muy dilatada en el tiempo, por ejemplo a un ritmo de un 1% anual a lo largo de una década», explica.
El CEO de Eix Hotels explica que Mallorca necesita que mejore la oferta complementaria. «Se ha hecho mucha incidencia en la mejora de la oferta de alojamiento en las últimas dos décadas y se ha conseguido modernizarla casi por completo, ahora es el turno de un plan de modernización del conjunto de la oferta complementaria», manifiesta. Horrach es crítico con el alquiler vacacional y la pasividad que ha mantenido el Consell de Mallorca durante años ante la ilegalidad. «Ya llevamos prácticamente dos décadas en las que «todo vale». Al principio asistimos a la expansión incontrolada de lo que se llamaba economía colaborativa que venía acompañada de un novedoso buenismo implícito y que ha demostrado ser perjudicial a la larga. Parece que estas dos últimas temporadas el Consell ha reaccionado y quiere poner coto a este disparate, el problema es que la administración ha estado demasiado tiempo inactiva», asegura.
Finalmente, reconoce el grave problema que supone la falta de personal cualificado. «Continuamos sufriendo la falta de personal, especialmente del más cualificado y experimentado. Ahora mismo es el problema más acuciante en este sector, si no se arregla, algunos establecimientos tendrán que dejar de prestar ciertos servicios. Sí, en un establecimiento tenemos un edificio destinado al personal con una veintena de habitaciones», indica.