Andrés Zahínos, director general de Puro Beach, asegura que la temporada ha sido bueno, aunque no tanto como la del año anterior. «La temporada ha sido buena, pero más moderada que el año anterior. Hemos mantenido e incrementado precios de forma prudente, priorizando valor y servicio sobre volumen. La ocupación ha estado en línea con el contexto del mercado y con un enfoque claro en mix de ingresos para proteger experiencia y rentabilidad», explica. Respecto a los precios, asegura que hay que proteger la tarifa cuando el producto es de calidad. «Todo pasa por una buena estrategia: proteger el ADR en el producto de calidad y ajustar puntualmente en ventanas de baja demanda. Hemos observador mayor sensibilidad al precio y cestas de gasto más prudentes. Trabajamos el valor añadido poniendo el foco en la experiencia del cliente», indica.
Zahínos valora de forma positiva la Mesa para el Pacto por la Sostenibilidad, pero reclama concreción. «El diálogo es positivo y necesario. Compartimos el objetivo de una sostenibilidad triple (económica, social y ambiental). Sin embargo, aún falta aterrizar medidas concretas y ambiciosas con calendario y KPls. La Mesa se constituyó con administraciones, agentes sociales y ambientales; valoramos el foro, pero pedimos más ejecución y métricas. Hoy por hoy, parece que el avance es insuficiente. Hay un buen marco de diálogo, pero poca concreción», indica.
El director general de Puro Beach explica que la prioridad debe ser la lucha contra las plazas ilegales. «No defendemos recortes indiscriminados de plazas legales. La prioridad debe ser perseguir la oferta ilegal y gestionar mejor la capacidad en picos», asegura. Zahínos explica sin tapujos cuál es su apuesta para que Mallorca mejore como destino. «Hemos de continuar por la senda de la calidad. Hay que invertir en producto y experiencia. Debemos creer en la desestacionalización con un calendarios de eventos, además de organizar pruebas deportivas, wellness, cultura... En movilidad, hay que prestar atención a la gestión de flujos para evitar la presión turística. Respecto a la vivienda, hay que hacer un control efectivo de la oferta ilegal y una ordenación clara de la legal», argumenta.
Respecto a la proliferación de viviendas turísticas ilegales, Zahínos explica que «recientemente el Consell de Mallorca afirmó que la mayoría de anuncios señalados por el Ministerio eran legales según la normativa turística insular, lo que evidencia descoordinación y la necesidad de inspección y datos unificados» y propone también «la colaboración técnica con plataformas y un repositorio único de licencias, con sanciones rápidas y visibles para disuadir».