El recién renombrado presidente del PP balear y líder del Ejecutivo autonómico, José Ramón Bauzá, aseguró ayer que "a todos les gusta quedar bien", pero "las medidas se toman por los caprichos de la oposición" en la anterior legislatura. Por eso, añadió que "una crisis sin precedentes" no se arregla "remendando" ni "dejando que pase el tiempo".
En su discurso de clausura del XIV Congreso regional del partido, afirmó que su voluntad es darle al PP "un aire más municipalista" y consideró que "es más importante que nunca estar en la calle". Bauzá explicó que en las medidas que se están tomando "no hay improvisación, hay rigor en la toma de decisiones y, por descontado, hay valentía para hacer lo que es necesario".
Asimismo, pidió que los afiliados no se olviden de que cuentan con "la legitimidad y la confianza" y "aunque haya gente que quiera hacer ver que hacemos las cosas mal no os lo tenéis que creer". "Podemos hacer mucho por la democracia y mucho más por la libertad en nuestra tierra", añadió.
"Desde el respeto a todos y cumpliendo con nuestra palabra. Trabajamos de sol a sol, por nuestra gente, por nuestra cultura, por todo lo que somos y lo que seremos. En nuestro partido es perfectamente compatible sentirse sin conflictos, ser españoles", aseveró. Así, dio las gracias "a las casi 8.000 personas" que le han votado y a los que votaron en blanco les aseguró que trabajará para ganarse "su confianza".
Respecto a los que no han votado, señaló que "es un reto de todos, no sólo del presidente sino de todos los afiliados". Afirmó que las ponencias aprobadas "serán la base del proyecto presente y futuro" y añadió que se compromete "a cumplir lo que pone" en ellas, porque han sido los afiliados los que las han votado.
Bauzá terminó su discurso diciendo que aunque "hay mucho trabajo por hacer somos un partido mejor de lo que éramos ayer, que se ha demostrado en el Congreso y trabajaremos juntos por lo mejor para las Balears".