El director general de Endesa-Balears, Joan Jaume, insiste en que las nuevas infraestructuras planteadas para conectar nuevamente el sistema balear con la Península no son necesarias, más aún cuando en estos momentos hay una potencia sobrante de 900 Megawatios como consecuencia directa de la construcción del primer cable eléctrico, que ha sido inaugurado recientemente.
De cara al ciudadano balear, cuantas más infraestructuras, mejor que mejor, ¿No?
-Cuando a un ciudadano le dicen que el Gobierno planea construir un nuevo enlace eléctrico entre la Península y Balears, mediante una inversión multimillonaria, para reducir los costes del suministros en las Islas e incrementar su calidad y seguridad, seguramente tendrá la impresión de que se trata de una excelente noticia, pero hay que analizar este hecho en toda su amplitud, porque no es así.
¿Qué falla entonces?
-La planificación estatal de transporte que se realizó en el 2000 decidió que se hiciera un gasoducto, que supuso una inversión de 500 millones de euros, justificado por la necesidad de quemar gas en las unidades de generación eléctrico, en sustitución de aquellos equipos que tenían que quemar gasoil, que era doble de costoso que el gas.
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