La expresidenta del Parlament y del Consell de Mallorca Maria Antònia Munar saldrá este viernes por primera vez del centro penitenciario de Palma, donde ingresó el 24 de julio del pasado año, para ser interrogada por el presunto cobro de un soborno de cuatro millones de euros que habría pagado la promotora Sacresa a cambio de resultar adjudicataria de los terrenos palmesanos de Can Domenge.
Munar, quien acumula dos condenas por corrupción que suman once años y medio de cárcel, una de ellas firme, fue acusada de beneficiarse de esta dádiva por el exconseller insular de Territorio Bartomeu Vicens, quien confesó que tanto la histórica dirigente de Unió Mallorquina (UM) como el exvicepresidente del Consell Miquel Nadal, el propio Vicens y UM -desaparecida a raíz de los numerosos casos de corrupción que pesaban sobre sus espaldas- percibieron hasta un total de cuatro millones de euros por la venta irregular de Can Domenge.
Unas afirmaciones acompañas por la entrega ante la Audiencia Provincial de Baleares, por parte de Vicens, de 160.000 euros del cohecho investigado y que llevaron a la Fiscalía Anticorrupción a interponer una denuncia por estos hechos y a registrar las viviendas de Munar y Nadal sin que en ellas se hallase rastro del dinero que presuntamente cobraron por el amaño del proceso.
Imputados
Precisamente, este jueves están citados a declarar como imputados Vicens (10.00 horas) y Nadal (11.00), quienes también se encuentran cumpliendo condena en la cárcel. Ya el viernes, la comparecencia de Munar está prevista a las 10.00 horas mientras que a las 12.00 está citado el supuesto intermediario que entregó el soborno, Miquel Llinàs.