La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) de Balears prevé que este verano sea ligeramente cálido y algo más lluvioso de lo habitual en las Islas y que, a partir de la segunda mitad de agosto, se intercalen algunos días inestables, con chubascos y tormentas intensas.
El informe presentado hoy por la AEMET vaticina que la temperatura de los meses de junio, julio y agosto sea ligeramente superior a lo normal, que se sitúa en los 24 grados, y que en agosto se alcancen las temperaturas medias más altas.
Se prevé un típico verano con días soleados, temperaturas altas y noches cálidas «tropicales» entre mediados de julio y mediados de agosto en las que las temperaturas no descenderán de los 20 grados centígrados.
El verano comienza este sábado, 21 de junio, a las 12.51 horas y finalizará el 23 de septiembre a las 4.29 horas, por lo que su duración es de 93 días y 15 horas.
La delegada de la AEMET en Balears, María José Guerrero, ha explicado este martes en rueda de prensa que lo habitual es que en verano llueva poco, entre uno o dos días al mes, y que lo haga de manera desigual. Además, en junio y julio las lluvias débiles suelen ir acompañadas de barro y registrarse alguna tormenta, en general seca.
Balears ya ha experimentado su primera ola de calor este año el fin de semana del 7 y 8 de junio con temperaturas de hasta 36 grados en muchos puntos de las islas, y que alcanzó su temperatura máxima el día 7 en Sóller con 38,5 grados. La primera quincena de junio ha sido muy cálida con 2 grados por encima de lo habitual y muy seca con un 85 % menos de precipitaciones.
El verano más fresco de los últimos años fue 1997 con una temperatura media de 21,6 grados frente a 2003, el más caluroso con una temperatura media de 27 grados.
El verano más seco fue 1985 con un nivel de precipitaciones de 4 litros por metro cuadrado, mientras que el más húmedo tuvo lugar en 2002 con 121 litros por metro cuadrado.
Por lo que se refiere a la primavera en Balears, aún por finalizar, ésta sido más cálida de lo normal con una temperatura media de 15,5 grados centígrados, con una anomalía de 0,9 grados por encima de lo típico.
En primavera, el mes más cálido fue abril con una temperatura media de 16,2 grados, es decir, 2,3 grados por encima de los valores normales. En abril se alcanzó una temperatura máxima histórica récord en algunos observatorios como los situados en los aeropuertos de Eivissa con 23 grados y Menorca con 20,3 grados, y Porreres con 23,3 grados.
La primavera ha sido en el conjunto de Baleares ligeramente seca con un 16 % de lluvias por debajo de lo normal, mientras que la distribución de las precipitaciones ha sido desigual: en Menorca ha llovido un 26 % más por encima de lo normal, en Mallorca ha sido ligeramente seca (-18 %) y en Ibiza muy seca con un 68 % menos de precipitaciones.
Si lo normal es que en primavera llueva 30 días, este año han sido 22 días. Los días de más precipitaciones fueron el 4 de abril con 74,4 litros por metro cuadrado en Escorca, el 26 de marzo con 54,4 litros en Escorca y el 28 de mayo con 54,9 litros en Establiments.
El día 26 de marzo nevó en la Sierra de la Tramuntana por encima de los 900 metros, acumulándose 10 centímetros de espesor en lo que fue la mayor nevada del año.
Por lo que se refiere al viento, se considera un día ventoso si la racha es superior a 50 kilómetros por hora. Marzo fue el mes de la primavera más ventoso con 144 kilómetros por hora el día 4 en la Sierra de la Tramuntana, la segunda racha más fuerte de marzo en los últimos 20 años.
La temperatura media de lo que llevamos de año es de 14 grados centígrados, 1 grado más de lo habitual
En cuanto a precipitaciones, hasta ahora el año puede calificarse de seco porque ha llovido un 20 % menos de lo normal. Han caído 165 litros por metro cuadrado cuando lo habitual es llegar a los 203 litros por metro cuadrado.
Por islas, en Menorca ha llovido hasta ahora un 20 % más de lo habitual, un 20 % menos en Mallorca y un 60 % menos en Eivissa y Formentera.