Los responsables de la investigación del posible amaño del concurso de adjudicación de Son Espases buscan conexiones entre el PP nacional y el proceso completamente irregular que se siguió en la adjudicación. Las dos empresas en liza por las obras del hospital, Dragados y OHL, son dos de las principales constructoras de España y sus nombres aparecen en los famosos papeles de Bárcenas como posibles donantes del PP. El apunte es del año 2006, el mismo de la adjudicación del hospital, si bien figuran vinculados a donativos relacionados con el PP gallego, según se informó en su día.
La toma de declaraciones previas se ha centrado en determinar cómo fue la cadena de mando a la hora de ordenar el pintoresco proceso de adjudicación y, hasta el momento, la cabeza visible a la que señalan los interrogados es Jaume Matas, el expresident del Govern que había ejercido tres años como ministro de Medio Ambiente.
Los interrogados no han señalado por ahora a nadie por encima de Jaume Matas, si bien algunos elementos relacionados con la adjudicación llevan a pensar que puede haber otras conexiones extrainsulares. La más decisiva es el hecho de que la empresa a quien se encargó la campaña de promoción del nuevo hospital fuera Over Marketing, que ya está siendo investigada en estos momentos en otro sumario por posible financiación ilegal del PP.
A la empresa dirigida por Daniel Mercado se le relaciona con la trama Gürtel. La consellera Aina Castillo aseguró que la decisión de que el plan de comunicación del hospital recayera en esta sociedad fue de Jaume Matas. El expresident ya había trabajado con esta agencia en Madrid, en su época como ministro de Medio Ambiente.
En cualquier caso, el grueso de la investigación se centra ahora en averiguar qué sucedió realmente en el proceso de adjudicación de Son Espases. Las sospechas apuntan a que el concurso podría estar amañado de antemano para que lo ganara OHL, pero el propio Matas dio la orden en el último minuto de parar la adjudicación, lo que propició que el ganador fuera Dragados.
Los investigadores del caso creen que los criterios de adjudicación estuvieron viciados de antemano por órdenes de Matas. En el proceso de valoración de las ofertas participaron dos técnicos propios del IB-Salut, pero el informe de valoración de ofertas que resultó determinante se encargó a Global, una consultora externa.