La evolución de las exportaciones de los sectores productivos de Balears durante el primer semestre de este año 2014 sigue una tendencia a la baja, ya que el volumen global alcanzó los 388 millones de euros frente a los 836 millones de 2013 (ver gráfico adjunto), lo que representa un descenso del 53,5 %, según datos de la Cámara de Comercio de Mallorca y del CSC-Agencia Tributaria.
El dato más destacado del balance de los seis primeros meses, es que las ventas de sal de Mallorca al extranjero crecieron un 543 % sobre el mismo acumulado del pasado, ya que se contabilizaron 50,7 millones de euros (7,8 millones en 2013). Lo mismo sucedió con las exportaciones de plásticos, que pasaron de los 4,5 millones del pasado año a los 34,9 millones de este año, que representa un 670 % de incremento.
Las ventas de sal marina se concentran en un 50 % a Alemania y un 20 % a Bélgica. La demanda de este producto ha superado todas las previsiones, tanto es así que en el acumulado enero-junio ha sido la principal partida exportadora balear, superando al calzado (48,1 millones), que ocupaba desde hace décadas el primer lugar.
La exportación de plásticos es muy diversa, pero va ligada a la expansión hotelera en el Caribe (Cuba, República Dominicana, Jamaica) o Cabo Verde. A estos países hay que sumar Italia, Alemania, Austria y Reino Unido. El resto de partidas están en negativo, como las ventas de patatas, goma de garrofí, aceites esenciales y bisutería.
La directora de Estudios de la Cámara de Comercio de Mallorca, Catalina Barceló, resalta que el resto de las principales partidas exportadoras de las Islas «están teniendo una tendencia negativa. Se exporta la mitad que 2013 y no hay una explicación lógica que lo justifique, salvo que haya una menor demanda de los países que importan productos de las Islas, especialmente todo el área de la Unión Europea, que es a donde van cerca del 80% de los productos que se exportan de Balears».
Para Barceló, el hecho de que las economías europeas no estén atravesando un buen momento, «justifica la caída importante de las ventas, pero hay un factor que hay que tener en cuenta, como es el hecho de que la producción ha bajado de forma alarmante, lo cual hace pensar que se ha perdido el dinamismo de años anteriores y que el tejido empresarial se está desmembrando». En cuanto al calzado, apunta que «cada vez se cierran más fábricas pequeñas, lo cual incide luego en los niveles de ventas».