El GOB ha lamentado que «el destrozo de ses Fontanelles sea motivo de satisfacción por los dirigentes políticos», en alusión al acto de presentación de este lunes del proyecto del centro comercial, al que acudieron el presidente del Govern, José Ramón Bauzá, y el alcalde de Palma, Mateo Isern.
«La imagen de la presentación el proyecto 'Palma Spring' de Unibail Rodamco hace sentir vergüenza de ser ciudadanos de estas islas», precisa en una nota de prensa el GOB.
Y añade: «Consideramos intolerable que se pueda permitir otro gran centro comercial que destrozará la última zona húmeda de Palma, un área que debería ser parque natural».
Por esta razón, el GOB ha hecho pública una carta elaborada por investigadores del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA) en relación «a los valores naturales que se enterrarán en ses Fontanelles» con la construcción del centro comercial que se proyecto en la zona.
La misiva se titula «Sobre Ses Fontanelles y lo que no se mide con dinero», en la que se critica la concesión de la licencia para la construcción de un gran centro comercial y que se justifique en que traerá «dinero y prosperidad».
«En este contexto, parece apropiado dar un contrapunto y explicar los argumentos por los que algunos pensamos que la zona de Ses Fontanelles debería defender y proteger, y que hay que pensar a largo plazo y no solamente en el beneficio de unos pocos (normalmente grandes multinacionales extranjeras)», continúa la carta.
El documento explica que Ses Fontanelles, con 38 hectáreas, es la mayor zona húmeda que queda en Palma y la más grande del sur de Mallorca y que, pese a los distintos procesos de transformación y degradación, «mantiene todavía un notable valor ecológico y paisajístico, que ha sido reconocido por parte de la Consellería de Medio Ambiente».
Destaca que en ella se encuentran numerosas especies de aves y contiene hábitats naturales de importancia comunitaria.
Los investigadores se refieren al Limonium barceloi, una especie incluida en la lista roja nacional porque solo se encuentra en este lugar en todo el mundo y le da a la zona un «valor extraordinario», junto con otras especies como los tamarindos, protegidos por la comunidad autónoma mediante el decreto 75/2005.
En total se han identificado cerca de 250 especies vegetales, lo que la convierte en una zona bastante rica en diversidad vegetal, y en cuanto a la fauna, es también abundante en invertebrados, concretamente en insectos, más de 30 especies de mariposas, que a su vez sirven de alimento a las aves, de las que se han censado unas 75 especies.
Un 40 % de ellas nidifican en Mallorca y 29 son típicamente de zonas húmedas.
Unas 40 de estas especies tienen alguna categoría de protección, cuatro están catalogadas en listas de especial protección por la legislación balear y de ellas destaca el rascado acuático, que nidifica en Ses Fontanelles.
«La destrucción de este espacio natural contribuiría, sin duda, a disminuir más aún las poblaciones de esta especie en Mallorca. Es bastante evidente que el mantenimiento de esta diversidad es totalmente incompatible con el proyecto de urbanizar la zona», añade la carta.
Critica también que «las recomendaciones que hicieron cerca de unos 40 científicos en el marco de un diagnóstico ambiental del sistema de la Platja de Palma han caído en un saco roto».
«Aquel proyecto de convertir la zona en un referente internacional de sostenibilidad hace tiempo que ha quedado sustituido por el de convertirlo en un referente del «shopping"», insiste la misiva.