El Govern reclamará el pago de la deuda correspondiente a las inversiones estatutarias, que ronda los 1.000 millones de euros, según ha confirmado un portavoz de la Conselleria d'Hisenda i Pressuposts. En el Govern no quieren dar más datos acerca de cuáles son las vías jurídicas que se iniciarán para exigir el pago de la deuda pendiente, pero insisten en que no se ha renunciado en absoluto a seguir reclamando este dinero.
El Estatut d'Autonomia que pactaron en su día Jaume Matas y Francesc Antich recoge una disposición que obliga al Gobierno a invertir en Balears entre 2007 y 2014 la media de lo que invierta en toda España. Si la inversión de los Presupuestos del Estado en Balears no llegaban a la media, el Gobierno debía realizar inversiones adicionales a través de convenios.
El cálculo apuntaba a unos 400 millones al año, pero la crisis provocó un descenso general de las inversiones del Estado por lo que la media no era tan elevada. Solo llegó dinero adicional en la legislatura combinada de Francesc Antich y José Luis Rodríguez Zapatero, y la cantidad que llegó es inferior a la estipulada por el Estatut.
Entre 2008 y 2010, ambos incluidos, llegaron 355 millones de euros. Para cumplir lo que marca el Estatut, Zapatero debería haber enviado a las Islas otros 422 millones más durante esos años. A partir de 2011, con el cambio de Govern, deja de llegar dinero. Si se hubiera cumplido el Estatut, durante este legislatura le hubieran correspondido a las Islas otros 533 millones en inversiones del Estado. No ha llegado ni un euro, así que la deuda total entre ambas legislaturas es de 955 millones.
El Govern de Bauzá no ha planteado hasta la fecha ni una sola reclamación y además no ha presentado ni un convenio para conseguir que el Estado cumpla el Estatut y pague lo que debe a las Islas.