El próximo Govern se parecerá muy poco al actual y sólo una de las diez conselleries, la de Salud, matendrá idénticas competencias.
El organigrama defintivo da un peso muy relevante al área económica, que se gestionará desde dos conselleries diferentes. Una con rango de vicepresidencia, que dirigirá Més, y otra que llevará las competencias de trabajo, industria y comercio. Esta última será para el PSIB.
Hay más novedades. Por ejemplo, que las competencias en materia de educación y de cultura estarán en conselleries diferentes. Una de nueva creación, la Conselleria de Transparencia, Participación y Cultura. Será una de las cuatro que corresponden a Més y de ella dependerá la televisión autonómica IB3, que antes estaba adscrita a Presidencia.
La Conselleria de Educación ya tiene titular. Será para Martí March, elegido en las listas del PSIB pero que dejará su escaño en el Parlament para reforzar su papel de independiente. No está afiliado.
Ejecutivo paritario
El Govern que presidirá Francina Armengol, tendrá diez conselleries: cuatro serán para Més y el resto para el PSIB aunque la de Educación será muy tranversal.
Pero no ocurre lo mismo en todas las áreas. Por ejemplo, está claro que Més controlará las áreas que dependerán del vicepresidente Biel Barceló. También las competencias turísticas. A esta superconselleria se ha adscrito también Innovación, lo que disgustó en Podemos (que no formará parte del Ejecutivo) ya que reclamaba una conselleria propia para reforzar su apuesta por la investigación y el desarrollo.
El Ejecutivo será paritario entre hombres y mujeres y habrá presencia del resto de las Islas. A Francina Armengol le gustaría que el menorquín Marc Pons fuera el conseller de Presidencia y que Pilar Costa (Eivissa) asumiera un área de relieve, quizá Hacienda o Territorio. También le gustaría que Més propusiera a Fina Santiago, que sería la titular de Asuntos Sociales y Cooperación. Los nombres aún no están decididos del todo.