«Sabíamos que teníamos un problema en las contrataciones, pero ya implementamos mecanismos para solucionarlo». Es lo que asegura el exconseller de Salut, Martí Sansaloni en relación el demoledor informe que ha hecho la Sindicatura de Comptes sobre las cuentas del IB-Salut de 2013.
El informe del máximo órgano de fiscalización contable detectó numerosas anomalías en las cuentas del IB-Salut tales como enchufismo, fraccionamiento de contratos e incumplimiento generales de la ley en las contrataciones.
Sansaloni reconoce que el informe es negativo, pero prefiere hablar de«errores» en lugar «irregularidades». Señala además que, pese a todo, la Sindicatura reconoce que ha habido una mejor con respecto a la situación de 2012. El informe relativo a ese año fue tan demoledor que el Govern tuvo que poner en marcha medidas correctoras cuyos efectos se apreciarán en los años sucesivos. «Queda mucho por hacer, pero la situación está mucho mejor que como la encontramos nosotros», dijo el exconseller.
Sansaloni afirmó que el IB-Salut hace ahora contratos, auditorías, control de plantillas y unificación de contratos. «No hemos llegado al cien por ciento, pero estamos en un 60 por cien, cuando nosotros lo cogimos en un dos por cien», señaló el exconseller.