Balears tenía el 1 de enero de 2016 un total de 55.749 empleados públicos, de los que 28.982 trabajaban para algún organismo de la Comunitat Autònoma. Supone una ligera reducción de apenas 220 trabajadores con respecto a julio de 2015 ya que en esa fecha el número total era de 29.202 empleados.
La cifra apenas es significativa en sí misma, pero sí lo es si se tiene en cuenta que, en los seis meses previos a las elecciones, el Govern de Bauzá aumentó el número de trabajadores públicos tras varios años de recortes.
Más contratos
Sin embargo, en los seis meses que mediaron desde enero hasta junio, fecha de las elecciones, Bauzá contrató a 2.023 empleados públicos. La reducción real durante la legislatura fue, por tanto de tan solo 1.620 empleados cuyos despidos han tenido un millonario coste en indemnizaciones que aún no ha finalizado porque los tribunales siguen dictando sentencias contra el Govern.
Hay que decir que la contratación masiva en época preelectoral no es exclusiva del Ejecutivo de Bauzá. Basta con comparar las cifras de la anterior legislatura para comprobar que Francesc Antich también se aplicó con gusto a la hora de contratar trabajadores públicos en los seis últimos meses de su mandato.
Estas subidas y bajadas en función de si hay o no elecciones de forma inminente ha hecho que en enero de este año haya prácticamente el mismo número de trabajadores públicos en el total de las administraciones que en enero de 2010.
Los sindicatos de la función pública se han quejado en repetidas ocasiones de que el descenso en el número de empleados públicos está teniendo consecuencias en su carga laboral y lamentan además que a ello se sume el proceso de recortes en algunos de sus complementos.