El Govern prevé un espectacular incremento de casi un 887 por ciento en las multas que impondrá el año que viene por sanciones en Turisme, de 736.260 euros a 7.270.280 euros. Es el dato que figura en los Presupuestos de la Conselleria para el año que viene, que están a punto de ser probados por el Parlament.
El Govern asegura que hay diversas razones que explican este aumento. La principal es que pondrá un marcha un plan de inspecciones, con el refuerzo de dos nuevas plazas, que ya se ha empezado a aplicar este verano y que está teniendo resultados muy positivos. La segunda razón que explica este incremento es que las sanciones mínimas pasan de 4.000 a 6.000 euros; y la tercera razón es que dejará de imponerse la sanción mínima como norma general, que es lo que estaba pasando hasta ahora.
Un portavoz de la Conselleria de Turisme señaló que a partir de ahora habrá mano dura en tres campos básicamente: se vigilará de cerca que los hoteles no ofrecen plazas para las que no están autorizados; se pondrá el foco en el alquiler vacacional para combatir el intrusismo en el sector y las ofertas ilegales y se hará un plan de inspecciones para luchar contra los establecimientos que ofrecen todo incluido sin tener la autorización.