Uno de los apartados destacados de la Ley de Memoria Democrática de Balears, tomada en consideración en el Parlament con el apoyo de los partidos que apoyan el Pacte es el sancionador, que prevé multas de entre 200 y 150.000 euros por la exhibición de símbolos o manifestaciones de enaltecimiento de la dictadura franquista.
La iniciativa, que no contó con el respaldo ni del Partido Popular ni de Ciudadanos, fue uno de los temas más controvertidos de la actualidad parlamentaria de la semana en la cámara balear. Este mismo jueves, el representante de Cs, Xavier Pericay, se ha vuelto a referir al tema, en una entrevista concedida a Canal 4.
En ella, el portavoz de la formación de Albert Rivera en las islas ha sostenido que «en el texto de la proposición de ley vemos que ciertos partidos sólo intentan mostrar su visión sobre la Guerra Civil», corroborando de alguna forma unas declaraciones anteriores, en las que afirmó que «en los dos bandos» de la contienda española «había demócratas».
Estas palabras fueron muy criticadas por la portavoz de Podemos, Laura Camargo, que explicó que Ciudadanos «ha demostrado la necesidad de esta ley». «Nos preguntamos cómo es posible pensar que hubiera demócratas en un bando que dio un golpe de Estado y que provocó una dictadura durante tantas décadas en nuestro país».
Asimismo, Camargo defendió que «debemos brindar a las generaciones futuras las herramientas necesarias para conocer el pasado y evitar repetir errores», añadiendo que, «tanto la Ley de Fosas como la de Memoria Democrática, son una cuenta pendiente con las personas que sufrieron la brutal represión franquista».
De premio el hijo de Carrillo es el Rector de la Universidad Complutense, una universidad ejemplo de democracia, la de Iglesias y sus secuaces.