El líder del PP, Biel Company, ha pedido al Govern balear que suspenda el cobro del impuesto a los turistas para incentivar los viajes a las islas y paliar así los efectos negativos de la quiebra del turoperador británico Thomas Cook.
Company ha planteado que, ante la «extrema gravedad» que el cese de actividades de Thomas Cook tiene para el turismo balear, es preciso que tanto el ejecutivo autonómico como el Gobierno central adopten de inmediato medidas concretas como la suspensión temporal de la tasa que grava las estancias en el archipiélago.
Además, el PP reclama que se supriman las tasas aeroportuarias a las compañías que asuman las rutas que deja vacantes la compañía británica, que se aprueben rebajas fiscales para las empresas perjudicadas, que se les faciliten «créditos especiales» y que tengan bonificaciones en sus cotizaciones a la Seguridad Social.
«Hoy ya hay hoteles que cierran en Mallorca» a consecuencia de la quiebra de Thomas Cook, ha asegurado Company, que ha reprochado al Govern balear que, a través del conseller de Turismo, Iago Negueruela, trate de adjudicarse algún papel en el intento frustrado de refinanciación del turoperador que protagonizaron grandes empresas turísticas de Baleares.
A su juicio, el Govern no ha sabido prevenir los efectos de una crisis de la que culpa exclusivamente a factores externos.
El presidente del PP de la islas ha expresado la solidaridad de su partido con los aproximadamente 1.000 trabajadores que podrían quedar en el paro en Baleares por la crisis de Thomas Cook, con los viajeros con dificultades para regresar a sus países y con los empresarios afectados.