El portavoz del comité autonómico de enfermedades infecciosas, Javier Arranz, ha informado este lunes que 252 están ingresadas por COVID-19 (25 por causas sociales), 33 en la UCI. Este fin de semana han ingresado unas 60 personas, 11 de ellas en la UCI. Además, hay 1.000 personas más que reciben atención domiciliaria.
«Estamos teniendo un pequeño repunte de ingresos», algunos en la UCI «y parte de ellos, nos dejarán, morirán». Varias personas de las UCI tienen entre 20 y 50 años, «tenemos personas jóvenes que están mal», ha insistido. Por Islas, Mallorca es la Isla con más personas hospitalizadas: 222, 27 de ellas en la UCI.
Arranz ha reconocido que «estamos en una segunda ola, con un repunte importante, que durará unos días». No obstante, ha precisado que no es la misma situación del pasado mes de marzo, que provocó un confinamiento generalizado.
Arranz ha destacado que hay transmisión comunitaria en Baleares y ha pedido responsablidad. «Los casos está aumentando y lo seguirán haciendo. «En función de cómo nos portemos, veremos decisiones en los próximos días. No estamos en una situación crítica del sistema sanitario y no queremos llegar», ha manifestado.
Arranz ha reconocido que ha preocupación por la situación de las residencias de la tercera edad, donde hay 24 afectados.
Ha detallado que había personas en una terraza, que llevan más de media hora sin mascarilla, tomando las consumiciones de forma lenta. «Cuando uno está en una terraza debe ponerse la mascarilla si tiene previsto estar más tiempo». También ha pedido que en las reuniones familiares o de amigos haya pocas personas. A los jóvenes que hacen actividades de riesgo (compartir bebidas, no respetar la distancia...) les ha advertido que los asintomáticos son responsables de la transmisión comunitaria que tenemos. «La transmisión comunitaria, cada vez tenemos más PCR positivo, de forma clara, lenta, pero ascendente».
Arranz ha manifestado, en un entrevista concedida a Ultima Hora, que «la normalidad no se recuperará hasta mediados del 2021».