Menorca es la isla balear que muestra una menor oposición a las medidas restrictivas que se ha aprobado con motivo de la tercera ola de coronavirus. Es una de las conclusiones que permite extraer la encuesta elaborada por el IBES (Instituto Balear de Estudios Sociales). Aunque el rechazo a las medidas para frenar el virus es mayoritario, las suspende el 48,9 por ciento y las aprueba el 39,9 por ciento, en la comparación con el resto de islas se observa como en Mallorca el porcentaje de encuestados que las censuran se eleva hasta el 55,5 por ciento y en Eivissa alcanza el 67,2 por ciento. Esas diferencias también se reflejan a la hora de valorar las concentraciones de protesta por las restricciones. Los encuestados que no las apoyan en ningún caso representan el 24,4 por ciento. En Mallorca ese porcentaje baja al 17,10 por ciento y en Eivissa, al 18 por ciento.
Al igual que el resto de residentes en Balears, los menorquines suspenden tanto la gestión de la pandemia del Gobierno de Pedro Sánchez, como la del Govern de Francina Armengol. Solo un 24 y un 22,2 por ciento respectivamente aprueban la gestión y es el Ejecutivo autonómico el peor valorado. Llama la atención que el 72,9 por ciento considera que las medidas que toma el equipo de gobierno de Armengol son fruto de la improvisación y no de la planificación. Los menorquines son los más críticos con la gestión autonómica y, preguntados por si el Govern está preparando bien la recuperación turística de cara al verano, el 70,9 por ciento considera que no. En Mallorca y Eivissa ese porcentaje baja al 62,4 y el 67,25 por ciento respectivamente.