La consellera de Salut, Patricia Gómez, ha asegurado este jueves en rueda de prensa que Mallorca ha consolidado el descenso de la incidencia acumulada, que a 14 días ya está por debajo de 400 casos por 100.000 habitantes. Algo que hace creer que «Mallorca comienza a doblar la curva de la tercera ola».
La situación de Baleares es diferente en cada una de las Islas. En este sentido, Gómez ha lamentado las cifras todavía «preocupantes» de Ibiza y Formentera, con más de 2.000 y 1.000 casos de incidencia acumulada, respectivamente. En el caso de Menorca, ha dicho, presenta cierta estabilización, bajando de los 500, en los que permanecía desde hace días.
La consellera ha subrayado que la media en España de la incidencia acumulada se sitúa en los 900 casos por 100.000 habitantes, por lo que Baleares se encuentra por debajo de la media y entre las comunidades a la cola en incidencia, cuando «hace unas semanas estábamos arriba».
El portavoz del comité autonómico de Enfermedades Infeccionas, Javier Arranz, ha señalado que en estos catorce últimos días Mallorca ha logrado bajar la incidencia acumulada y en estos momentos la Isla está en «desaceleración importante», pero la situación, ha alertado, «es inestable». De hecho, ha insistido en que la mitad de las zonas básicas están «en un incremento negativo, pero otras han experimentado en los últimos días pequeños repuntes. Lo ideal es que todas las zonas básicas fueran en incrementos negativos y con clara tendencia descendente».
Arranz ha celebrado que Mallorca se encuentra en un incidencia acumulada a 14 días de 379 casos por cada 100.000 habitantes, «de las mejoras cifras desde hace tiempo», pero no podemos decir que «qué bien, toda Mallorca está en bajada. Para poder alcanzar un nivel de 100 casos, todas las zonas básicas deberían experimentar ese descenso».