La presidenta del Govern, Francina Armengol, ha asegurado, este miércoles, que su planteamiento para hacer frente a los problemas económicos de la sociedad «no es una bajada masiva» de impuestos. En este sentido, la dirigente balear ha concretado que «nunca bajaría los impuestos a los ricos a cargo de las familias trabajadoras». «Ese no es nuestro planteamiento», ha afirmado en declaraciones a los medios en un acto en Calvià. Tras recordar la reunión de este lunes de la Mesa de Diálogo Social, la presidenta del Ejecutivo de Baleares ha subrayado que «siempre» se han tomado medidas para las familias y empresas «de forma pactada y consensuada». Por ello, ha concretado que están «abiertos a escuchar a patronales y sindicatos» para establecer un bloque de medidas que alivie a los ciudadanos, empresas y trabajadores de las Islas.
Además de resaltar «la buena temporada turística que ha permitido a Baleares liderar el crecimiento económico», Armengol ha subrayado que «cuando sea necesario» el Govern volverá a estar «al lado» de quien lo necesite. En este sentido, el planteamiento del Ejecutivo de Armengol «no es una bajada masiva de impuestos», sino de facilidades a través de deducciones fiscales o ayudas directas para los ciudadanos. «Será de una forma concreta para que lleguen a las personas que realmente lo necesitan», ha afirmado, para después terminar: «Las anunciaremos cuando las tengamos pactadas en la Mesa de Diálogo Social».
Por otro lado, la presidenta se ha referido a la protesta que este martes por la tarde protagonizaron más de 40 entidades frente al Consolat de Mar contra la masificación turística en el Mediterráneo. Armengol ha aseverado que este es el discurso del Govern y, por ello, han aplicado políticas para hacer posible «el mayor equilibrio» entre turismo y residentes para «garantizar una buena experiencia vital y turística». «Somos la única comunidad autónoma que ha limitado los cruceros en Palma», ha subrayado, a la vez que ha recalcado la prohibición de alquiler vacacional en según qué espacios y una ley turística que contempla una moratoria en el crecimiento de plazas turísticas. «Actuamos en esta línea porque somos conscientes que Baleares es un territorio frágil».
Precios en las obras
Por último, la presidenta del Govern ha afirmado que se está cumpliendo con la licitación de obras en Baleares. Armengol ha respondido a la queja de la Asociación de Constructores de Baleares sobre la falta de actualización de precios, algo que ha provocado que un total de 57 obras públicas hayan quedado desiertas en 2022. Con todo, la presidenta ha explicado que desde la Asociación han subrayado que por parte de muchos municipios hay una inaplicación de la normativa autonómica en beneficio de la estatal. «Hago una llamada a los ayuntamientos para que se aplique la norma de Baleares y intentar flexibilizar al máximo para hacer posible que las obras públicas puedan salir», ha finalizado.