La candidata del PP Marga Prohens ha asegurado que la obligación de que los hoteles instalen camas elevables «es la mayor tontería en política turística de los últimos tiempos». La candidata del PP hizo estas declaraciones en una entrevista realizada en Canal 4, en la que aseguró que los hoteleros de las Islas se han mostrado en contra de esta medida, incluida en la Ley de Turismo.
Prohens ha añadido que los hoteleros con los que se ha reunido han criticado esta medida, a pesar de que fue pactada por el Govern y la Federación Hotelera. Prohens afirma en esta entrevista que esta medida la defienden algunas grandes cadenas hoteleras, pero no los pequeños propietarios que tienen uno o dos establecimientos, que, según dijo, son la mayoría en las Islas.
Precisa que las 'kellys' quieren menor carga de trabajo, un reconocimiento de las bajas laborales y asegura que las camas elevables no eran su prioridad. "Fue un titular en una feria de Fitur donde se presentó una ley turística que no existía, era una ley fantasma turística", ha opinado la presidenta del PP, que considera que esta ley fue "el señuelo" para aprobar una moratoria "que perjudica al pequeño empresario y al trabajador".
La presidenta del PP de las Islas asegura que derogará la Ley de Turismo aprobada por el pacto en esta legislatura y recuperará la que se aprobó en el año 2012, cuando la Conselleria de Turisme estuvo en manos de Carlos Delgado, primero, y de José Ramón Bauzá después. Prohens opina que es preciso favorecer la inversión pero considera que, después del esfuerzo de modernización que han hecho estos años los hoteleros, es el momento de que la Administración actúe.
La presodenta de los 'populares' también ha anunciado que su partido no derogará la ecotasa si gobierna, pero sí la modulará y hará que el dinero que se recaude se destine a fines turísticos y ambientales, no como sucede en estos momentos. También se ha mostrado en contra de autorizar nuevas plazas de alquiler vacacional, pero ha opinado que la zonificación deben decidirla los ayuntamientos.
No soy pepera, igualmente en eso le doy toda la razón, y por muchos motivos, entre ellos: es sostenible cambiar 400.000 (no estoy segura del número) camas? Y los residuos que se generan? Es un gasto asumibles por los hoteleros? No sería mejor reducir la carga de las kellyes reduciendo el número de habitaciones que hacen y así crear más puestos de trabajo? Y todas las demás profesiones con gran carga de trabajo (albañiles, jardineros y afines) qué? Dónde está la igualdad? Esa fue una medida sin mucho pensar de Hatmengol, que la vende cómo si fuera oro... 🤮 Y si tiene que ser, que las camas sean elevadas y no elevables, saldría algo de trabajo para los carpinteros sin generar un montón de desechos...