Meliá Hotels International se muestra muy optimista de cara a esta próxima Semana Santa en la que, tras la recuperación del turismo a nivel internacional, la hotelera mallorquina prevé mejorar en más de un 20% los datos de ventas registrados en 2019. Destacan especialmente algunos destinos nacionales como Canarias donde los hoteles mejoran su ocupación y alcanzan unas tarifas medias históricas. Así lo desvela el vicepresidente ejecutivo y consejero delegado de Meliá, Gabriel Escarrer, a través de su cuenta de Linkedin, asegurando que el turismo es una industria con un «inmenso potencial de crecimiento a largo plazo» (superior a la media del PIB global para los próximos 10 años) y debe recuperar el atractivo laboral que siempre ha tenido.
La Semana Santa siempre ha sido el 'pistoletazo' de salida de la temporada vacacional en España. Con la llegada de la primavera, los hoteles de temporada vuelven a abrir sus puertas para viajeros tanto nacionales como internacionales. Una temporada que se espera muy positiva para la hotelera Meliá que confía incluso en superar lo datos de año 2019, «un año de referencia bastante positivo para nuestra industria». «Pendientes de confirmarlo cuando pasen estos días y tengamos los datos reales del negocio generado en Semana Santa por parte de nuestros hoteles, ya podemos adelantar que, como muchos hemos ido anticipando, la perspectiva turística es positiva», asegura el directivo.
Los hoteles vacacionales de España los que destacan especialmente en estas festividades aunque también que se esperan cifras bastante favorables para los hoteles urbanos ubicados en las principales ciudades del país, como Valencia, Sevilla, Barcelona o Palma. En el segmento vacacional destaca especialmente el comportamiento de Canarias, donde los hoteles mejoran su ocupación y las tarifas medias históricas. En las costas peninsulares se recuperan volúmenes que no se vieron el año pasado, gracias al empuje de los mercados internacionales, y en Baleares la hotelera está abriendo un mayor número de hoteles que en años anteriores en las mismas fecha, lo que permitirá alargar la temporada.
Entre ellos destacan especialmente los hoteles ubicados en Calviá, en la zona de Magaluf, donde se busca conseguir «un turismo de calidad y atractivo» tanto para el turismo internacional como para el nacional, siendo en estos días el turista español la segunda nacionalidad con más presencia en los hoteles de dicha zona, después del británico. Todo ello anticiparía, según el directivo, un verano positivo, impulsado además por la vuelta de la conectividad aérea que, situada ya a niveles prepandemia, ayudará, sin duda, al retorno del turista internacional a España. Escarrer asegura que además de España otros destinos vacaciones como el Caribe también están viviendo una recuperación extraordinaria, y si las previsiones se cumplen, también vivirán temporadas históricas para su turismo.
La atracción del talento, el gran reto del rector
Escarrer también se refirió a la importancia de la atracción del talento como gran reto para el sector durante los próximos años. En su opinión, el sector se ha recuperado «con gran fortaleza» lo que le permitirá volver a crecer por encima del PIB global hasta el año 2030. Pero para ello la retención de talento es fundamental. La salida de numerosos empleados con motivo de la pandemia, así como la fuga de parte del talento joven cualificado a otros sectores, sumado a una oferta descontrolada de alquiler vacacional, ha provocado, según Escarrer, que en muchas ciudades y zonas vacaciones se sufra una «inflación residencial» que lleva a la imposibilidad para muchos trabajadores de temporada para encontrar «una vivienda digna», un problema que se agrava en territorios limitados como las Islas Baleares.
«La escasez de personal cualificado es una realidad y con cada vez una mayor competencia entre compañías para conseguir atraer el talento, nos vemos ante un gran riesgo para nuestro sector, ya que para nosotros las personas son esenciales», asegura el directivo. Por ello, además de anticipar programas de reclutamiento en zonas sensibles e intensificar su relación con escuelas y universidades, desde Meliá se ha desplegado un «intenso programa» para atraer y retener el talento, donde además de mejorar las condiciones y la experiencia del empleado, se ofrecen planes de formación y desarrollo e incluso, en algunas ocasiones, se les proporciona alojamiento, especialmente en zonas sensibles como las islas. «Somos una industria de personas para personas y por ello, reconectar con las nuevas generaciones de trabajadores será fundamental para que sigamos avanzando en la mejora de la calidad y sostenibilidad de nuestro turismo», concluyó Escarrer.