La fachada del PP de Palma luce desde el pasado jueves una pancarta morada con el lema 'Dones, sí o sí'. El cartel, que el partido usó para presentar su campaña por el Día de la Mujer el pasado 8 de marzo, vuelve a tener otra función. Si hace poco más de un mes sirvió para reivindicar su apoyo a la causa feminista, ahora cuelga desde el balcón para celebrar la reforma de la ley del 'solo sí es sí' promovida por el PSOE con el apoyo del PP para acabar con el goteo de revisiones de rebajas de prisión a violadores.
La normativa ha sido modificada sin el consenso de Unidas Podemos, socios de gobierno de los socialistas e impulsores de la ley. Los ‘populares' escribieron en un tuit que este cambio ha sido posible «gracias al voto del PP».
El pleno del Senado dio luz verde el miércoles definitivamente a la reforma de la ley, siete meses después de aprobarse esta polémica iniciativa y tras la rebaja de un millar de condenas a agresores sexuales y la excarcelación de un centenar de ellos. Las nuevas penas, que entrarán en vigor al día siguiente de su publicación en el Boletín Oficial del Estado, rescatan las horquillas del anterior Código Penal para castigar con más años de cárcel las agresiones sexuales en las que haya violencia o intimidación.
La reforma solo podrá aplicarse a las agresiones que se cometan una vez entre en vigor y seguirá habiendo revisiones de condenas dictadas con anterioridad. Según los últimos datos aportados por el Consejo General del Poder Judicial a mediados de abril, al aplicar la ley del solo sí es sí los tribunales han acordado 943 reducciones de penas de agresores sexuales, que han supuesto al menos 103 excarcelaciones.