Una mujer se encuentra en estado crítico, tras haber sido brutalmente agredida por su pareja sentimental con un martillo. Todo apunta a que su marido, un ecuatoriano de 50 años, asestó numerosos golpes a su mujer, fracturando parte del cráneo, nariz y una de sus manos. La víctima ingresó en un principio en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Son Espases en estado crítico, pero a media mañana consiguió salir y se encuentra hospitalizada en planta. Las próximas horas serán determinantes para conocer la evolución de la paciente, pero se teme por su vida.
Según las primeras hipótesis de la investigación los hechos ocurrieron en la calle Bernat Amer de Palma en torno a las 3:15 de la madrugada de este martes. Fue el propio agresor que llamó a la central de emergencias del 112 alertando de que su mujer estaba en la cama cubierta de sangre. En un primer momento no aportó más datos. Con suma celeridad, agentes de la Policía Local de Palma llegaron al lugar del suceso y se encontraron al hombre, totalmente fuera de sí y con un comportamiento muy extraño. En otra de las dependencias de la vivienda localizaron a la mujer cubierta de sangre y con aparentes lesiones graves.
Los funcionarios policiales localizaron en el domicilio el martillo utilizado con restos de sangre. Todo apunta a que el acusado había intentado esconderlo tras limpiarlo. A pesar de que en un principio el marido decía que no sabía nada y que no se acordaba de nada, al final acabó reconociendo los hechos. En ese instante, se procedió a su detención por un presunto delito de violencia de género y otro de tentativa de homicidio.
Acto seguido llegaron los funcionarios de la Policía Nacional y el Grupo de Homicidios se hizo cargo de la investigación de lo ocurrido. El acusado, fue ingresado en calidad de detenido en el Área de Psiquiatría del hospital de referencia de Baleares. Una vez realizada la valoración psiquiátrica por parte de los profesionales, el hombre ha sido conducido a los calabozos de la Jefatura de Policía de Palma.
Todo apunta a que la víctima había comunicado a su esposo la intención de poner fin a la relación. Desde hace meses la relación era muy tormentosa. De hecho, vivían en la misma vivienda pero en habitaciones separadas. Fuentes policiales consultadas por Última Hora confirman que no existían denuncias previas por violencia de género.
RafelYa es INSOPORTABLE