Baleares fue en 2023 la tercera comunidad con la mayor tasa de demandas de separaciones y divorcios, con 213,9 por cada 100.000 habitantes, tan solo por detrás de Canarias (247,3) y Comunidad Valenciana (223,1).
Las demandas de disolución matrimonial presentadas el pasado año en España bajaron un 3 % respecto al año anterior, según los datos del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) publicados este viernes, que indican que la caída se ha producido tanto en divorcios como en separaciones y nulidades.
En 2023 se registraron 52.803 divorcios consensuados (un 4,2 % menos que el año anterior), mientras que los no consensuados apenas variaron (un 0,5 % menos). Hubo 2.369 separaciones consensuadas (un 8,2 % menos) y las separaciones no consensuadas cayeron un 11,5 %, hasta 1.039. Las nulidades pasaron de 65 en 2022 a 50 en 2023.
De esta manera, en 2023 el número de demandas de disolución por cada 100.000 habitantes en España fue de 192,1.
Las tasas más altas se dieron en Canarias, con 247,3 demandas de disolución matrimonial por cada 100.000 habitantes; Comunidad Valenciana (223,1); Baleares (213,9); Murcia (204,3); Andalucía (198,9); Castilla–La Mancha (195,7) y Cataluña (194,9).
Por el contrario, las tasas más bajas se registraron en el País Vasco (157,3 demandas por cada 100.000 habitantes); Castilla y León (158,2); Madrid (160,9); Extremadura (179,4) y Cantabria (184,7).
Además en 2023 se presentaron 12.485 demandas de modificación de medidas consensuadas, un 1,6 % menos que en el año anterior, y también se redujo el número de demandas de modificación de medidas no consensuadas, un 2,2 % menos.
Por el contrario, las demandas de guarda, custodia y alimentos de hijos no matrimoniales consensuadas fueron 22.273, cifra que representa un ligero incremento, situado en el 0,9 %, y las no consensuadas, que sumaron 27.280, aumentaron un 3,1 %.
Durante los últimos tres meses del año, el número de demandas de disoluciones matrimoniales, nulidades, separaciones y divorcios en el país se redujo en un 1,4 % respecto al mismo trimestre de 2022.
Poniendo en relación las demandas de disolución matrimonial del total del año con la población a 1 de enero de 2023, el mayor número de demandas por cada 100.000 habitantes se dio en Canarias, con 66,7; Murcia, con 65,8; Comunidad Valenciana, con 62,7; Asturias, con 61,6 y Cantabria, con 61,5.
En todos esos territorios, se superó la media nacional, que fue de 53,4 demandas por cada 100.000 habitantes. Los valores más bajos se registraron en el País Vasco, con 40,6; Madrid, con 43,7 y Castilla y León, con 43,9.