La actual generación del CB Boscos, ahora en edad cadete, cierra un ciclo con Jordi Anglada al frente tras tres temporadas en los que ha conquistado el título balear en otras tantas ocasiones y ha dejado su impronta en los correspondientes campeonatos de España.
El último, que se está disputando en La Seu d'Urgell, ha servido para ratificar y valorar la propuesta que sobre el parqué desarrollan los jugadores del club de Santa Clara. Eliminados de la primera fase tras perder con el Joventut (98-57), la expedición ciutadellenca se ha sorprendido por los parabienes recibidos desde los diferentes estamentos presentes en la competición.
«Y eso que perdimos de cuarenta», aunque en realidad ha sido el rival que le ha puesto las cosas más difíciles al grupo verdinegro preparado por Pau del Tío. «Una vez más no hemos tenido suerte en el sorteo de los rivales», se lamenta Anglada, al margen del nuevo formato fijado por la Federación que situó en los grupos más «flojos» -de los que se clasificaba sólo el primero- al Joventut y al CAI. «Contra otros rivales habríamos competido más» y las opciones de ser primeros más próximas.
Anglada pone punto final a este ciclo «inolvidable» con un equipo capaz de iniciar un tercer cuarto contra la Penya con un 10-0, situarse a nueve puntos y forzar al equipo badalonés a desplegar su mejor juego. «Hemos sido valientes, les hemos jugado de cara, defendiendo los bloqueos directos con 2 contra 1, pese a su impresionante envergadura. Reconforta que se hable bien de nosotros, por nuestro juego, en un campeonato de España un año más», explica el técnico.
«¿Si me voy satifecho? No, lo siguiente», proclama Jordi Anglada, que considera, tras tres cursos al frente de las generaciones de 2000 y 2001, «necesitan un cambio. Continuar sería más de lo mismo. Los jugadores han de escuchar otros discursos, nos conocemos demasiado». Anglada sentencia que «han de seguir su camino y crecer con otro entrenador».
Si si, es fiets juguen allà on ells i papàs volen jugar. Si veuen oportunitat de créixer a un club diferent al seu, tenen tot es dret d'anar-hi. Passi el que passi, sa decisió final és seva. A ferreries hi ha gent de migjorn, a mo gent de Sant Lluís i Es Castell, i allà hi ha maonesos. Aquest estiu tornarà haver moviment i acusacions de "fitxatges". Ridícul.