El Barça logró la noche de este martes su vigésimo título de campeón de la máxima categoría del baloncesto español, la Liga Endesa, tras imponerse en la final por tercera vez en tres partidos al Real Madrid, esta a domicilio en el WiZink Center con un resultado de 82-93. El duelo, muy igualado durante los tres primeros cuartos, se decidió en los diez minutos finales, en los que se mostró más acertado el conjunto azulgrana con un inspirado Jan Vesely, que acabó como máximo anotador de su equipo con 19 puntos. En el cuadro blanco destacó Walter Tavares, también con 19 y la gran primera parte del menorquín, Sergio Llull (8), que se queda sin una nueva liga.
El Barça tiró de solvencia y de un gran acierto en el lanzamiento exterior para estirarse cuando los minutos comenzaban a agotarse para los intereses blancos. El Real Madrid no supo defender y dejó tiros demasiado liberados para un Barcelona que estaba pletórico de confianza. No hubo más, el Barça se vio con tiempo para saborear sobre la cancha el título y disfrutó de su merecido campeonato.
Partidazo el que ofrecieron ambos conjuntos en el WiZink los primeros 20 minutos. Desde el inicio el Madrid fue ligeramente superior, con el conjunto blanco paliando los errores que cometieron en Barcelona. Sin embargo, el Barça puso una marcha más al inicio del segundo cuarto y se marchó de siete (22-29) pero con la entrada de Causeur y Llull, el conjunto de Mateo le dio la vuelta (41-38).
Sensaciones de Chus Mateo
Nada más acabar el encuentro, el entrenador del Real Madrid, Chus Mateo, no puso reparos a la derrota: «Ellos han acabado la temporada muy bien. Es difícil mantener el nivel tan alto durante mucho tiempo. Hemos peleado hasta el final, pero son justos vencedores», dijo, muy caballero, el técnico blanco.