El Hestia Menorca demostró este sábado que sabe ganar. Y también fuera de la Isla. Los doce triples convertidos en Oviedo por el equipo de Javi Zamora consolidaron la primera victoria foránea de un colectivo que fue capaz de rearmarse para cortar una lacra de seis derrotas consecutivas (78-84). El cuadro menorquín abandona provisionalmente el ‘farolillo rojo –pues el Clavijo juega este domingo– con un partido en el que mostró gran madurez.
El pívot conquense Víctor Arteaga, que firmó 15 puntos y 11 rebotes, en su mejor actuación desde que llegó a la Isla, el escolta norteamericano Eric Demers, que anotó 18, con cuatro triples, Jacob Grandison, máximo anotador menorquín con 20 tantos, y Omar Lo (13 puntos y 9 capturas, aunque muy errático en el tiro libre, con 1 de 6) fueron los mejores exponentes de un Hestia Menorca, que confirmó con su triunfo en Oviedo que durante la semana ha tenido capacidad para rearmarse y revitalizarse.
Varias transiciones ofensivas muy rápidas por parte del Oviedo hicieron daño hasta un parcial inicial 6-0. Javi Zamora no tardó ni dos minutos en pedir el primer tiempo muerto. El parón sentó bien a un jugador, Demers, pues tres triples suyos liberados igualaron el encuentro (9-9). Grandison se sumó a la fiesta y, así, el cuadro blanco se puso por delante a base de anotaciones únicamente desde el exterior. El Alimerka Oviedo se hizo con demasiadas segundas jugadas en ataque. Las defensas mejoraron y creció el juego físico de ambos equipos durante el segundo cuarto, en cuyo tramo final sendos triples de Grandison y Molins establecieron la máxima diferencia a favor del Menorca, con la que se alcanzó el descanso (41-45).
El tercer cuarto lo arrancó mejor el equipo asturiano. Martí encabezó un parcial 4-0 para poner las tablas. Grandison frenó la mala reanudación de los suyos con un buen robo y un mate al contragolpe. Tras esta canasta, la igualdad volvió a la pista. Los equipos demostraron estar inspirados ofensivamente, pues no pararon de anotar en posesiones cortas.
Clave
Arteaga hizo mucho daño en pintura por altura y buena mano, siendo uno de los jugadores clave del tercer cuarto (58-61). Las alternancias en el marcador se sucedieron. Al conjunto menorquín le faltó algo de concentración y de intensidad para frenar los ataques del Alimerka Oviedo (64-67). El Hestia Menorca arrancó el último cuarto con un triple de Hannah, situando la máxima diferencia visitante en seis puntos (64-70). Sin embargo, el acierto del estadounidense fue replicado con otro triple de Josep Pérez. Para el conjunto menorquín, lastrado por una mala senda de resultados, fue importante llegar a los últimos momentos por delante. Lo y Arteaga aparecieron ahí para hacerse fuertes en la pintura, conseguir rebotes ofensivos y sacar canastas forzadas.
La ansiedad por recortar diferencias pasó factura en el tramo final al cuadro ovetense y, así, el Hestia Menorca hizo unos minutos finales perfectos, jugando con inteligencia con el cronómetro y los nervios del rival para no solo mantener las distancias sino aumentarlas merced a un gran Víctor Arteaga (78-84).
El apunte
Javi Zamora: «Un triunfo necesario, refuerza la moral»
Javi Zamora, entrenador del Hestia Menorca, destacó la importancia del triunfo en Asturias. «Después de seis derrotas consecutivas y los problemas de varios jugadores, esto es un refuerzo para la moral del equipo. Necesitábamos una victoria, y más fuera de casa para tener ese refuerzo positivo y levantar la cabeza, pero esto no para y queremos ir a por más», comentó de inicio el entrenador madrileño. «Tuvimos muchas circunstancias que nos golpearon. Ha sido la primera semana que tenemos a todos los jugadores y me alegro por los que superaron adversidades, sobre todo por Arteaga, que fue la clave del partido por su presencia en ambas zonas y su intimidación. Viene de tres semanas duras de jugar con muchísimo dolor y me alegro por él, porque se lo merece más que nadie», continuó el técnico. «Fue un partido bonito de ver para el espectador y en el que primaron los ataques. Hubo mucho acierto en la primera parte. Fueron dos cuartos de mucha anotación. Los dos equipos, pese a hacer buenas defensas, recibieron canastas de mucho mérito. La tónica de la segunda parte siguió por ahí. Acabamos anotando 12 triples. Gracias a ello, cogimos unos puntos de ventaja que supimos administrar, porque fue un partido cerrado hasta el último minuto y medio», completó el técnico del Hestia Menorca.