Con la inyección anímica por el holgado triunfo ante el Real Valladolid Baloncesto (76-57) y con la convicción de que las cosas funcionan y que se está en el mejor momento del curso –y probablemente en el más indicado–, el Hestia Menorca juega esta noche (19h) en el Pabellón Multiusos Ciudad de Cáceres su enésima final en la maratón por la permanencia matemática y cuanto antes mejor en la exigente LEB Oro.
El cuadro dirigido por el madrileño Javier Zamora se enfrenta a un herido y necesitado de alegrías y de victorias, Cáceres Patrimonio de la Humanidad. Y lo hacen los menorquines en disposición de cerrar esta semana frenética de encuentros con una nueva victoria que les coloque ya con dos dígitos en la clasificación;o sea, alcanzando los diez triunfos que acercarían aún más al Hestia a una salvación, al menos a día de hoy, con buena pinta.
Sin embargo, sabe el Hestia Menorca que en esta primera de las diez finales que le restan de competición doméstica en la LEB Oro, tendrá enfrente a un Cáceres dolido y renqueante, tanto a nivel mental como clasificatorio. El propio técnico extremeño, Arturo Álvarez, hablaba de «miedo a ganar» de los suyos. Y lo dijo tras caer en la pista del Rioverde Clavijo 78-76 y cuando lo tenían ganado. Por ello, los cacereños esperan con ansia el encuentro de esta noche, penúltimos con solo cinco triunfos y sí, viéndoselas hoy en casa ante un rival directo en la lucha por la preciada salvación como es el Hestia Menorca.
Los menorquines, con el único reto en el Multiusos extremeño de seguir sumando hasta cerrar las matemáticas de la permanencia, se enfrentan a un Cáceres que, como el mismo club advierte en sus redes sociales, espera que hoy, «sea una fiesta y que Cáceres y el Cáceres consiga en la tarde del domingo lo que llevamos mucho tiempo esperando: la victoria». Los de Zamora se encontrarán delante a un rival que acumula ocho tropiezos seguidos pero que tiene en sus filas a hombres de la talla del pívot serbio Darko Balaban (213cm) –con experiencia en la LEB Oro–, el base colombiano, Hansel Atencia o el joven alero internacional mexicano de 204cm, Gael Bonilla, exFC Barcelona.
En principio y en palabras del mismo Zamora, el Hestia, para intentar atrapar el décimo triunfo contará con toda su plantilla, incluso los jugadores que vienen de sufrir algunos problemas físicos en su última aparición. El contratiempo del director de juego catalán, Pol Molins, por molestias en la rodilla y «el susto» del también exterior, Álvaro Sanz, finalmente han sido descartados como lesiones de gravedad por las pruebas «rutinarias y de control» realizadas a ambos bases del cuadro menorquín, por lo que han podido entrenar y estaban «disponibles para viajar». Al igual que el último en llegar, Golden Dike, en sus primeros entrenamientos con el equipo y a la espera de ver si hoy será su debut.