El Hestia Menorca cerró la noche de este martes en Maó su andadura en la primera Copa España de la historia entregando una derrota intranscedente ante el Palmer Mallorca Basket, un equipo de inferior categoría pero que demostró en la Isla el excelente recorrido que está delineando en este arranque de curso en Segunda FEB, cuya clasificación lidera invicto, no responde a un casual (65-68).
El cuadro insular, que tuvo en el búlgaro Pavlin Ivanov a su mejor anotador (18 puntos convertidos para liderar también la estadística del partido en ese aspecto), no contó con Víctor Arteaga, que ni tan solo fue inscrito en el acta del partido, quizá producto de que el desenlace del mismo era totalmente insignificante para la suerte del colectivo de Javi Zamora, que arribó a esta última jornada del torneo copero sin posibilidad ninguna de arrebatar al Castelló de Joan Faner el primer lugar del grupo G. De ahí también que el técnico madrileño del Menorca optara durante muchos momentos por dar minutos a su segunda unidad.
Más allá del poco valor del resultado, no procedería desmerecer el triunfo mallorquín. Provisto en sus filas de nombres como Miki Servera (el que fue base en el último proyecto de la Isla en ACB, en 2011, fue de los mejores del partido), Alessandro Scariolo (el hijo del seleccionador se marcó un partido de lo más eficaz), o el escolta norteamericano Charles Easley, por citar a tres de sus perfiles más relevantes y reconocibles.
El Menorca apenas mandó en el marcador en el 4-3 inicial, a lo que el Palmer contestó con un parcial de 0-11 para abrir una brecha en torno a la que trató de gestionar los ‘tempos’ del encuentro (7-17, primer cuarto).
La distancia en contra del equipo menorquín creció hasta un más preocupante -16, (13-29 a 4:39 del descanso). El Palmer se mostraba muy certero desde el triple, mientras que el cuadro insular sufría en defensa.
Stoilov con seis puntos consecutivos, fue el rostro de la reacción local, pero que apenas alcanzó en esos últimos compases del segundo periodo para irse doce abajo a los vestuarios (23-35).
Tras el intermedio, el Menorca trató de acelerar el partido buscando rápidos ataques, pero Palmer le sostuvo el ritmo de inicio, tanto de juego como de anotación (31-43), hasta que Ivanov empezó a entrar en combustión (39-43 después de ocho puntos consecutivos, secuencia que incluyó dos triples, del escolta de Yambol). Pero el Palmer, por medio de Ander Urdiain dio rápida réplica, también desde el 6.75 (46-56, tercer cuarto).
El Menorca, a base de defensa y de incrementar sus porcentajes, mostró su versión más aseada en el cuarto final, lo que le dio para ir remontando, minuto a minuto, hasta llegar a los últimos segundos con la posibilidad de ganar, errando sin embargo con 62-64, Figueras primero y Alderete después, sendos intentos triple que habrían permitido al equipo mahonés avanzarse en el marcador. En cualquier caso, derrota insignificante para el Menorca, ya centrado en el Valladolid y en Agustí Sans, a los que recibe en cuatro días en duelo de liga.