Este domingo finalizó la Volta a Menorca BTT, con la celebración de la etapa más corta, que no menos dura, del itinerario, comprendida de 56,5 kilómetros de trazado y con menor desnivel acumulado –apenas 433 metros, por los 1.000 de la etapa inaugural. La salida tuvo lugar a las 9 de la mañana desde Ciutadella.
La etapa estuvo también marcada por dos partes claramente diferenciadas. Una primera visualmente muy agradecida, que recorrió una zona con pequeños barrancos, al noroeste de Ciutadella (Cala'n Brut, Cala'n Forcat y Cala Piques), y una segunda parte, a partir del Pont d'en Gili, que pasó a trascender como muy técnica, y de una estética sin igual y pedregosa en Sa Falconera, Torre del Ram y Faronati, hasta la llegada al ‘lloc' de Es Rafal des Capità.
Dicha zona generó opiniones encontradas en el seno del pelotón. Por un lado, los participantes más técnicos y experimentados alabaron la misma, definiéndola como el tramo más diferente y exigente, pero también el más divertido de las tres etapas. Por otro lado, los ‘bikers' menos avezados en terrenos arduos debieron de cubrir el mismo, gran parte de sus diez kilómetros, caminando. Ese tramo dispuso su final en los aledaños del Pavelló Municipal d'Esports de Ciutadella, donde tuvo lugar el avituallamiento. Desde ese punto dio inicio otra ruta, mucho más rodadora y amable, recorriendo el Camí de La Trinitat –que el Ayuntamiento de Ciutadella adecuó para la ocasión, según destacan desde la organización de la prueba, la Penya Ciclista de Ciutadella. La prueba prosiguió por el barranco de Macarella, donde lamentablemente tuvo lugar la caída más grave que ha registrado la presente edición de la Volta, protagonizada por un ‘biker' que accedió al mismo con demasiada velocidad, lo que propició el accidente y que tuviera que ser evacuado en ambulancia.
De llegada a la playa, y en lugar de tomar el Camí de Cavalls, el pelotón continuó hasta Macarella por los peñales, para después si poner rumbo al CdC pasando por las playas vírgenes de Cala'n Turqueta, Es Talaier y Son Saura, tramo que sí requería de mayor técnica sobre los pedales, y retorno por el Camí de Son Bou Nou, enlazando con S'Hort de Ses Taronges.
Los primeros ‘bikers' llegaron a la meta, sita en el IES Maria Angels Cardona, a las 13.30 horas de ayer domingo, donde asimismo tuvo lugar la ceremonia de clausura, con una fideuà que reunió a manteles cerca de 800 personas, cocinada por el equipo de cocineros de Joan Mir. Asimsmo, se llevó a término la entrega de trofeos conmemorativos, entre los que destacaban el entregado al ‘biker' venido de más lejos, que recibió el chileno Sergio Hernán Vega, al ‘biker' más joven, que fue para Bernat Baradad –siete años recién cumplidos– y al más veterano, que fue Claude Aguettand. También hubo reconocimiento para el grupo de ciclistas más numeroso que participó en el evento (Grup Esportiu Es Port, Sa Indioteria y Ses Walkiries).
El acto de clausura estuvo amenizado por el grupo Feeling, y contó la asistencia de diversas autoridades, como la presidenta del Consell, Susana Mora, y del conseller de Deportes, Miquel Company.