Un futbolista que no siente un proyecto no sube a rematar un córner en el descuento para ganar el partido. Un futbolista que no es fiel a un club, no se levanta instantes después de recibir el 1-1 para enviar un obús que obliga al portero a despejar a córner. Un futbolista que no es profesional no logra la templanza en mitad del campo para chutar una falta tan ajustada y precisa donde el guardameta no puede llegar y lamentablemente repele el póster.
Ayer el Sporting pudo perder o empatar, pero un testarazo de Jeroni en el tiempo añadido hizo justicia (2-1) para un grupo de chavales que ante el chaparrón que supone no cobrar desde julio han decidido tirar del carro cuando lo fácil hubiese sido arrojar la toalla. Lección de profesionalismo de los hombres de Luis Elcacho, que no hicieron su mejor partido, pero lograron la victoria más importante, la moral, que supone mucho más que tres puntos, la que anima a seguir caminando a pesar de que la tormenta lo complique todo. ¡Chapeu!
El primer acto fue tosco. Feo. Trabado. La tramontana debutó esta temporada en Bintaufa, aunque los dos equipos parecieron obviarla en los primeros 45 minutos porque el esférico sobrevolaba el verde de Maó constantemente. Hubo muy poco criterio, demasiadas imperfecciones. Un montón de condicionantes comprensibles dada la delicadísima situación que atraviesa el club y los jugadores, que a día de hoy casi juegan por amor al arte.
El partido no se decantó por ningún lado. Los dos equipos se dedicaron a intercambiarse balonazos. En mitad del caos sobresalió un zarpazo de Berto Vaquero al cuarto de hora que se fue fuera. El Olímpic de Xàtiva de un Toni Seligrat que tras el partido se mostró emocionado de volver a Maó tampoco se definió demasiado, sin saber si jugaban al ataque, al contraataque o a verlas venir. El local Goñi, en la mediapunta, se peleaba una y otra vez con la zaga roja intentando que llegaran balones a Arkaitz pero sin suerte.
La única opción que llegó en el bando visitante fue a los 24 minutos cuando Álex Vaquero, el más activo de los de Seligrat, remató demasiado picado un centro de Quintana, que dejó literalmente sentado a Barreda. Con todo a favor, incomprensiblemente, falló.
Una jugada calcada sirvió como la mejor ocasión para el Sporting. Esta vez fue Nacho del Moral el que se zafó técnicamente de su par y centró para que Jeroni, llegando desde atrás, rematara elevado. De ahí, hasta el descanso, el encuentro se mantuvo en su tónica intrascendental. Vamos, que no pasó nada.
La única cosa que cambió en al inicio del segundo tiempo fue la colocación de los equipos. El Sporting, que con el viento a favor no fue capaz de chutar, tuvo que remar a contracorriente. Soldevilla se mostró más incisivo y los locales mejoraron mínimamente. Esa mejoría fructificó a los 57 minutos cuando el propio Soldevilla conectó un balón peinado por Arkaitz y superó a Francis en un agujero defensivo de los levantinos.
A partir de ahí surgió Eloy. El portero del Sporting Mahonés, una vez por delante el equipo de Elcacho, se encargó de salvaguardar el 1-0 con dos paradones. El primero en un remate de Silva a bocajarro al que llegó con las puntas de los dedos. El segundo, en un cara a cara con Nando, algo escorado, en el que sacó una manopla tras cubrir bien el espacio. Entre las dos opciones visitantes, Soldevilla pudo sentenciar con una vaselina preciosa que se fue alta por poco.
El mazazo llegó en un fallo infantil. Un error de comunicación entre Eloy y Raül Capó en un centro chut de Ruben Carreras, significó el 1-1 que se encargaron de celebrar con más euforia los compañeros del alaiorense que el propio 22 rojo, ex del Sporting Mahonés.
Lejos de caer como una losa, el empate pareció herir el orgullo del Sporting que a la técnica le puso corazón. Corbella pegó un cañonazo que obligó a Francis a lucirse, Del Moral envió una falta en la frontal al palo, pero tuvo que ser Jeroni el que resolviera, uno de la tierra. El central conectó un córner botado a la perfección por Alcover en el 93 y propició el delirio. En la piña que se formó, los tres puntos fueron lo de menos. Menudo ejemplo de profesionalismo. Tome nota quien le corresponda.
"Políticos despertad de una vez porque estáis hundiéndonos a todos"
Luis Elcacho, en muletas tras una operación de menisco realizada la pasada semana, estaba contento. Radiante. Pero no por los tres puntos sino porque "mis jugadores han dado una auténtica lección de profesionalismo".
El partido fue lo de menos, el catalán aprovechó su comparecencia para cargar contra la administración pública, concretamente contra los políticos por los problemas de cobro que están teniendo en el Sporting.
"Los chavales necesitan una referencia, llámese Sporting Mahonés, Fútbol Menorca o Ciutadella, porque llegan a edades complicadas… Políticos despertad de una puta vez porque estáis hundiéndonos a todos, no solo a nosotros".
Elcacho aseguró que "esta victoria nos hará ver la botella medio llena, estoy orgulloso porque han dado una lección de profesionalismo muy grande y la victoria ha sido merecida". El técnico se mostró preocupado y realista ante la situación que vive el club: "Si no cobramos no creo que lleguemos al mercado de invierno. Somos jornaleros del fútbol. Muchos han acudido a sus ahorros. Los trabajadores del club ya nos hemos adaptado a rebajar presupuestos pero esperamos que estos sacrificios que hacemos se vean recompensados de alguna forma, ya que cobramos poco que al menos cobremos".
Esta situación parece que ha calado en los socios. "Antes del partido ha venido un socio y me ha revelado que le ha llegado todo lo que nos está pasando y me ha preguntado dónde tenía que ir para ayudar en lo que pueda. No creo que vaya a cubrir todo el presupuesto pero ese gesto demuestra que hay gente en la Isla que le interesa el fútbol", explicó el de Lleida.
"No sé qué pasará pero si surgen otras posibilidades es normal que las familias exijan, por mucho que te guste, pero trabajamos para poder vivir", denunció el preparador blanquiazul, que no dudó en afirmar que "el orgullo y el amor propio han propiciado que sacáramos esta victoria adelante".
Luis Elcacho destacó la presencia en el equipo de Ignasi, Jeroni, Joan Barber, a pesar de que ahora está lesionado, y Berto como referencia para los jóvenes menorquines.