Final del culebrón Guiem Martí. El futbolista mercadalenc llegó este viernes a un acuerdo con el CD Tenerife para rescindir el contrato que le unía con la entidad canaria y fichó por lo que resta de temporada y la siguiente con el Sociedad Deportiva Huesca que milita en el grupo 2 de la Segunda B, equipo dirigido por David Amaral y que marcha séptimo, a dos puntos de la Promoción. Martí pone así fin a una más que desesperante situación en el equipo insular, que casi no contaba con el jugador ya que en lo que va de temporada solo había participado en tres encuentros en la liga y uno de Copa del Rey, con tan sólo 98 minutos de juego y unas pocas convocatorias como suplente.
En los últimos días del mercado invernal se barajaron diversas posibilidades de traspaso, todas infructuosas; quizás la más importante llegó del equipo que milita en la Primera División de Azerbaiyán, Ravan Baku FK. El único y gran inconveniente fue el económico con el acuerdo entre los dos clubes ya que por parte del jugador el acuerdo era total para ir a este equipo de la Premier League de este país. Al final la decisión de recalar en lo que queda de temporada y la próxima 2014-15 en la SD Huesca se ha visto como una muy buena opción para entrar en competición y ganar minutos de juego ya que en las dos ultimas temporadas, en el CD Tenerífe los minutos de participación en partidos oficiales han sido pocos y las ganas de jugar del delantero menorquín son ahora muchas.
«a recuperar sensaciones».
Costó, pero Martí logró ponerse de acuerdo, «para beneficio y satisfacción de los dos», con el Tenerife. Y pese a ver de cerca su marcha a Azerbayán o al Jaén de Segunda A, se muestra feliz por su nuevo destino. «Me han hablado muy bien del Huesca, como un club de los más serios en Segunda B y que este año quiere jugar la fase para regresar a Segunda A», desvelaba anoche el delantero mientras hacía las maletas para poner hoy rumbo a la ciudad aragonesa. «Quiero recuperar sensaciones, volver a tener minutos y a sentirme jugador y voy a ayudar al equipo», aseguraba un Martí que mañana verá a sus nuevos compañeros ante el Real Irún.