Raúl Capó (Ciutadella, 1980) jugará la próxima temporada en el Penya Ciutadella. El experimentado central menorquín finiquita así su segundo ciclo en el fútbol catalán (que ha cubierto en el Cornellà, y desde el pasado octubre, en el Rubí), comprometiéndose con el club de Son Marçal en detrimento del Mercadal, que también ha pujado por hacerse con sus servicios, oferta que el jugador desestimó el martes por la noche. El trato con el Penya es por una temporada, pero el propio Capó no descarta que «puedan ser más».
El defensa, miembro de la plantilla del Sporting Mahonés que obtuvo el ascenso a Segunda B en 2009, y con el que militó hasta la campaña de su desaparación, en 2012, explica que su decisión de firmar por el Penya responde al deseo de establecerse en Menorca, con una perspectiva de futuro que va más allá del fútbol. «Lo comenté con mi mujer, tenemos ganas de volver a la Isla, y si para mí la prioridad fuera deportiva o quisiera hacer dinero con el fútbol, habría fichado por el Mercadal. Pero ya tengo una edad y pienso en más cosas que en el fútbol».