El Penya Ciutadella sigue sin reaccionar y sufrió ayer en feudo del Collerense –que sumaba diez jornadas sin ganar– una nueva derrota para seis salidas consecutivas sin vencer. El cuadro de Dani Mori, además, repitió errores habituales en otras citas, como falta de concentración defensiva e inoperancia en ataque. Y eso que los de Ciutadella no pudieron empezar mejor, avanzándose en el marcador con gol de Javi Zurbano antes de que se cumpliera el cuarto de hora de partido. No obstante, el equipo menorquín no solo fue incapaz de conservar la renta al descanso, sino que incluso entregó la derrota en los instantes finales del encuentro.
El Penya apareció bien plantado en el terreno de juego, con un dibujo ordenado y buscando con criterio el marco mallorquín. Tras alguna que otra aproximación, el delantero navarro Zurbano estableció el 0-1 y la dinámica como foráneo parecía poder invertirse por parte menorquina. Sin embargo, a partir de ahí, los de Dani Mori no supieron actuar en consonancia a su ventaja. Y merodeando la media hora de partido, en la primera acción de peligro clara sobre el marco menorquín, Ángel García imponía el empate, con el que se alcanzaría el descanso. Poco fútbol en la primera mitad a raíz del empate local.
A la vuelta de los vestuarios, el Penya intentó controlar el juego desde la medular, a la vez que ambos conjuntos elevaban el nivel de intensidad del partido, lo que rindió mayor beneficio al Collerense. El cuadro mallorquín, así, se encontró con el gol de Raúl Gómez cuando el partido encaraba su tramo final. Un despiste defensivo del Penya resultó fatídico, y aunque el cuadro de Ciutadella lo intentó en los últimos instantes la derrota se consumó (2-1).