Desolación final en Los Pinos tras el empate sin goles este domingo entre el Alaior y el Son Cladera que otorga el ascenso al conjunto mallorquín que hizo valer el 1-0 del partido de ida.
El equipo de Julián Calzada, espoleado por su afición, no pudo con un rival sobrio, ordenado y que al final celebró el retorno a Tercera División con sus seguidores. A los albinegros les pudo la presión y no encontraron el camino hacia la meta rival.
El partido pudo alterarse cuando en el primer tiempo, el portero del Son Cladera, Vives, desvió un penalti ejecutado por Gabi.
En la segunda parte, el Alaior, con más corazón que cabeza, buscó el gol mientras el once mallorquín, a la contra, pudo sentenciar la eliminatoria.
En los 25 minutos finales, el Son Cladera jugó en inferioridad por la expulsión de Nico, pero el conjunto de Calzada, que sustituyó el físico por el talento, no encontró el gol y perdió el tren del ascenso.
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