Agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, llegados de Madrid, se han personado la mañana de este martes en la delegación balear de la Mutualidad de Futbolistas, en Palma, y en la sede de la Federación Balear de Fútbol (FFIB), en Son Malferit, para requisar documentación en relación con la investigación de la operación Soule.
En estos momentos, los agentes se encuentran trabajando en el interior de ambas sedes recopilando información para este caso, que saltaba a la luz a primera hora de este martes con la detención de Ángel María Villar y su hijo. Los registros en la Mutualidad, donde se encuentran su interventor -Manuel López Lacal- y el asesor jurídico de la FFIB -Germán Rodríguez-, han comenzado alrededor de las 09.30 horas. Los agentes están solicitando información muy concreta y, de ahí, que el registro se esté alargando. Concretamente, están solicitando diferentes facturas y están recabando información de contratos con determinadas empresas.
Según ha podido saber este periódico, aunque también se han personado agentes en Son Malferit, todo apunta a que la investigación se centra en temas relacionados con la mutualidad. Son diez las territoriales que están siendo investigadas por la Guardia Civil en relación con las empresas de Juan Padrón, presidente de la Federación Tinerfeña y detenido también la mañana de este martes.
La investigación se inició a principios del 2016 tras una denuncia formulada por el Consejo Superior de Deportes y se ha podido determinar que el presidente de la RFEF durante más de 30 años, Ángel María Villar, «pudo haber impulsado la celebración de partidos entre la Selección Española de Fútbol y otras selecciones, consiguiendo de esta manera contraprestaciones para la contratación de servicios y otras relaciones comerciales en beneficio de su hijo, abogado especialista en derecho deportivo, detenido igualmente en la operación».