El balompié isleño vuelve a levantar el pulgar. La asamblea general ordinaria de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB), reunida este sábado en el Espai Francesc Quetglas y a la que acudieron 69 miembros con derecho a voto, aprobó la gestión de la juntad directiva que preside Miquel Bestard, las cuentas del ejercicio anterior y las previsiones presupuestarias del nuevo curso. Además, sacó adelante una propuesta de la Conselleria de Cultura, Participació i Esports para que las deportistas femeninas que hasta ahora podían formar parte de equipos masculinos hasta categoría infantil lo puedan seguir haciendo también en los dos años del apartado cadete.
La asamblea, en la que estaban representadas todas las islas, arrancó con u una exposición de Bestard en la que destacó el crecimiento que ha experimentado el fútbol balear y el buen nivel de su arbitraje, que la temporada que viene estará representado en la elite tras los ascensos de Cuadra Fernández y Amy Peñalver a la Primera División, masculina y femenina, respectivamente, algo inalcanzable durante los últimos 25 años. A su vez, el presidente insistió en que después de catorce años al frente de la Federació su «prioridad» es y seguirá siendo el fútbol balear y que su nombramiento como vicepresidente de la Real Federación Española de Fútbol se debe «al ejemplo de unidad que se transmite» al resto del país.
La comisión delegada «tumba» el código ético
La comisión delegada, que se reunió el viernes para decidir las propuestas a presentar en la asamblea, denegó por mayoría la que elevó el Consell de Menorca para prorrogar un año más el código ético que se ha aplicado solo en nuestra Isla en las dos últimas décadas, en las categorías benjamín y alevín, una puntuación alternativa que añade o resta puntos a los obtenidos por el marcador, en función de otras variables. El Consell expresó a la JIM su disconformidad y descontento.