A lo largo de las últimas semanas, el Sporting de Mahón, por medio de su director deportivo, José Villalonga, ha pulsado a la directiva del CD Menorca sobre la posibilidad de instrumentalizar un acuerdo de colaboración, unión o filiación entre ambos clubes. La cúpula azulgrana, liderada por su presidente en funciones, Miguel Ángel Sintes ?cargo que desempeña a raíz de la renuncia de Tom Blanco, si bien a ojos federativos, este aún figura como máximo mandatario del club?, lejos de desestimar el planteamiento se ha mostrado receptivo ante el mismo, que de cristalizar, apuntaría para no antes del verano de 2019, según desvelan desde el entorno del Estadi Maonès.
El origen de las conversaciones se remonta a algo más de un mes atrás. La mala dinámica deportiva que atraviesa el equipo juvenil del Sporting, en zona de descenso desde que empezó la actual temporada ?primera en que compite en Liga Nacional? motivó un intento del club de Bintaufa por conseguir la cesión de algunos jugadores del conjunto ?B? azulgrana que compite en el circuito insular ?el ?A? es rival directo en la categoría balear. Sin embargo, el club ?descendiente? del finado Sporting Mahonés, que incluso durante la presente campaña ha madurado la posibilidad de retirar el conjunto juvenil de la competición, pues los escasos recursos que cuenta en plantilla combinado con los duros resultados que se están encajando está haciendo mella en el ánimo del vestuario, se encontró con la negativa rotunda del Menorca al préstamo de cualquier futbolista.
Visto el fracaso del otrora glorioso fútbol mahonés, la mejor opción para dejar de hacer el ridículo sería que los tres clubes serrasen el chiringuito y se dediquen a jugar a las canicas. O a la canaricultura y colombofila. Les irá mejor.