Es Mercadal, este pequeño gran pueblo del centro de Menorca con poco más de 6.000 habitantes según la última actualización de Instituto Nacional de Estadística del 2024, vive momentos dulces y de ensueño, gracias a los grandes resultados del CE Mercadal en la cantera. A base de trabajo y organización y casi sin apenas necesidad de tener que recurrir a otras localidades o clubes para salir adelante –a excepción de Es Migjorn Gran y Fornells–, han alcanzado en apenas dos semanas la gloria en diferentes ligas menorquinas, haciéndose con tres de las seis grandes ligas de División de Honor en Menorca: campeones con el equipo Benjamín, el Alevín y el Cadete, que además de ser campeón de liga insular –ha logrado el doblete al imponerse también en la Copa–, consigue el ascenso a la Cadete Autonómica y competirá por vez primera en las Illes Balears, junto al CD Menorca. Además, en el club mercadalenc han atado la Liga de Primera Regional en Infantil y un año más, de momento y a la espera de lo que hagan Sporting de Mahón y CE Ferreries este fin de semana, es el único representante menorquín en la próxima Tercera RFEF 2025-26
Del resto del pastel de las Divisiones de Honor menorquinas, en sus respectivas Ligas, el ‘Ferre’ se ha llevado la Infantil, el Ciutat d’Alaior la Prebenjamín y el Menorca la juvenil, con su correspondiente ascenso a Liga Nacional 25-26. O sea, que a día de hoy y frente a grandes ciudades como Ciutadella y Maó o entidades de gran volumen humano como Menorca, Penya Ciutadella o Ciutadella CE, en el Mercadal se llevan el gato al agua y tras vérselas sin terreno de juego durante media temporada, ahora sonríen con sus títulos alcanzados. Unos logros que llegan tras unos años en los que apenas les daba para presentar equipo en todas las categorías y que con la llegada y puesta en escena de sus dos directores deportivos, Eric Barber en campo pequeño y Rubén Carreras en fútbol 11, han logrado reinventar y amortizar hasta ser, al menos todo este año, un referente y envidia en el fútbol menorquín.
Formación del equipo benjamín mercadalenc de la División de Honor que este martes se proclamó también campeón de Liga | C.E.M.
Carreras (campo grande)
«Cuatro ligas y una copa, qué locura; muy contentos y el secreto es trabajo, dedicación, tiempo, pasión y paciencia», revela Carreras, que dirige el fútbol mayor y entrena el Cadete A. «Clave tener la suerte de contar con entrenadores que hacen un gran trabajo, de los que aprendimos mucho y nos han ayudado a crecer como coordinadores estos cuatro años», agradece el veterano jugador. «Al entrar cogimos una escuela sin proyecto, donde casi cada año se cambiaba de coordinador y nuestro objetivo siempre ha sido ir paso a paso, alcanzando pequeños objetivos, uno a uno».
Más allá de copas y en pleno periodo de formación, recalca Carreras que los títulos están bien, «estamos muy orgullosos, pero en el fútbol formativo son secundarios. El reto es y será formar futbolistas y personas. Si a través de los aprendizajes conseguimos ganar títulos, mejor. A todos nos gusta quedar primeros». Sin embargo, pretenden él y Barber que su escuela sea un espacio donde niños/as, «disfruten de un entorno sano, con los aprendizajes necesarios para crecer día a día, dentro como fuera del campo. El objetivo es formar, desde el primer día hasta el último».
Carreras, que recuerda que también tienen chavales de Es Migjorn Gran y Fornells, dice que, «formamos una gran familia en el Mercadal y es de lo que estamos más contentos y orgullosos. Antes la falta de continuidad y proyecto en cantera hacía que muchos chicos/as no encontraran lo que buscaban y acabaran jugando en otros clubes. Ha sido uno de nuestros retos que esta comunión entre pueblos vuelva a estar presente, como lo había sido antiguamente», lanza, orgulloso.
Rubén Carreras considera «básico» el amor y afecto a los colores y al escudo, como parte de sus éxitos. «Hay un gran sentimiento de club y es estupendo. Estamos muy contentos de ver la sintonía afición-escuela y tanto el otro día en el partido que decidía el ascenso del Cadete, como anteayer con el Benjamín, la gente respondió y disfrutó, si bien, lo ha hecho toda la temporada. Y sabemos que la próxima campaña, con todos los retos que tenemos por delante, también lo harán. Repito, es fantástico», exclama, deseoso de ver canteranos en el Tercera RFEF. «Es el gran reto. Ver jugadores que han sido parte de la escuela llegar al primer equipo, objetivo final. No es fácil. Tercera es una competición muy exigente, lo vemos cada año, pero estamos más cerca cada vez», abunda, analizando que, «vienen jugadores que si siguen con su progresión, tienen potencial para un día debutar con el primer equipo. En los últimos años hemos tenido una serie de jugadores con presencia semanal en el Tercera y es importante que escuela y primer equipo trabajen juntos para conseguir ese gran objetivo».
Finalmente, como coordinador de fútbol 11 y el ‘míster’ del ascenso, admite que el Cadete, «es un gran reto, una gran oportunidad para dar un paso más. Doy las gracias personal y públicamente a todos los jugadores que han conseguido este ascenso. Han hecho historia en el club y nos sentimos muy orgullosos».
Barber (campo pequeño)
«Más que secreto es mucho trabajo y muchas horas dedicadas a los niños; al empezar, Rubén y yo teníamos claro que el objetivo era formar a los chicos, crecer en número de niños y equipos en la medida que se pudiese», señala Barber, recordando que cuando accedieron al cargo, «faltaban categorías y estaba algo desestructurado. Era empezar nuestro proyecto con las bases que ya estaban asentadas, más las que introducimos, e intentar hacer crecer lo máximo a los niños, deportiva y personalmente». Ahora mismo, según Barber, «hemos logrado que la escuela crezca en jugadores y ya se empieza a ver un poco el fruto del trabajo que intentamos llevar a cabo durante estos cuatro años. Pero el objetivo principal siempre seguirá siendo formar», abunda, en la misma línea.
Barber da importancia al hecho de que Es Mercadal ha crecido, «y en los niños se ha notado, de ahí poder tener más equipos, con la ayuda de los niños de Es Migjorn Gran o Fornells, encantados con ellos», prosigue el también técnico del Alevín A. Y habla Barber de sentimiento de pertenencia y amor a los colores: «La verdad es que estos últimos años el pueblo se ha volcado con el club, la respuesta de la gente ha sido brutal y todo el mundo pone su grano de arena. Ver el ambiente que hay en la entidad –en la cantera y primer equipo– es espectacular; comunión padres y jugadores, con gente del club y pueblo, muy bonita de ver y disfrutar».
Y el reto, a largo plazo y siguiendo con la misma metodología y entusiasmo, nutrir de mercadalencs al Tercera RFEF. «Lo que más nos gustaría sería poder ver a chicos del club en el primer equipo. Ya hay alguno que si sigue así pronto estará preparado para esa oportunidad», vaticina Barber, uno de los ‘profes’ del proyecto. «¿El Cadete Balear? Un reto para nosotros, no será nada fácil y vamos a intentar hacer el equipo más competitivo posible para lograr el objetivo, que será la salvación».
Ni lo veras.