Tras anotar dos triples vitales para la victoria de España ante Grecia (84-77) en el segundo partido de la fase de grupos del torneo olímpico de baloncesto masculino de los Juegos de París 2024, disputado en Lille, Rudy Fernández protagonizó la imagen y el gran susto del partido. En una acción fortuita, el alero balear cayó al suelo con la mala fortuna de que la espinilla de su compañero Juancho Hernangómez impactó contra su cabeza. El primer parte médico facilitado por el equipo español refiere que Rudy sufre un fuerte golpe en el cuello, pendiente de evolución.
Rudy se retiró de inmediato al banquillo, donde fue asistido por el médico de la selección, Carlos Salas, para realizar una primera evaluación del estado del capitán del equipo español, que siempre estuvo consciente, pero sí se encontraba mareado. Por ello, se optó por retirarle al vestuario para seguir la evolución de ese golpe. Minutos después, el seleccionador español, Sergio Scariolo, lanzaba un mensaje tranquilizados al respecto del estado de Rudy: "No está muy mal, tiene un golpe fuerte y creemos que será duda para el partido ante Canadá", del viernes a las 17:15 horas, y que cerrará la fase de grupos en Lille. El último parte médico es más esperanzador y deja ver que sí estará a disposición de Scariolo este viernes.
El balear aportó al triunfo frente a Grecia 10 puntos, con dos triples vitales en el último cuarto antes de retirarse de la pista ayudado por auxiliares del cuerpo técnico español. A sus 39 años, el exterior formado en Sant Josep Obrer disputa sus sextos Juegos Olímpicos, siendo el primer jugador de la historia en alcanzar esta marca. Y parece que el de Canadá ya no puede ser su último partido, pues la victoria ante los helenos les abre las puertas de los cruces de cuartos de final, ya en París.